La inmobiliaria Urbas ha anunciado este miércoles que promoverá dos nuevas torres de viviendas en Zorrotzaurre que serán vendidas por 98 millones de euros a M&G Real Estate. Este fondo de inversión británico destinará las 314 viviendas de ambas torres al alquiler privado.

En concreto, la compañía cotizada M&G Real Estate ha acordado con Urbas promover 'llave en mano' 314 viviendas, 407 plazas de garaje y 314 trasteros divididos en dos torres de 15 y 17 plantas, que serán transmitidos al fondo una vez completados. Según han adelantado, se espera que podrán ser habitadas en el segundo semestre de 2026.

Las torres, construidas sobre una superficie de 29.000 m², contarán con instalaciones comunes con jardines y zonas de recreo infantil y zona de gimnasio, así como también dispondrá de una superficie comercial de 360 metros cuadrados.

La promoción se encuentra en la isla de Zorrotzaurre, zona en la que Urbas está desarrollando más de 850 viviendas que se suman a las más de 4.300 que hasta la fecha componen su portfolio residencial, con un peso del 45% en 'build-to-rent'.

El presidente y consejero delegado de Urbas, Juan Antonio Acedo, ha explicado que desde la compañía están «muy satisfechos» con esta operación que representa un hito corporativo importante y que confirma el atractivo de los proyectos de Urbas y su potencial de rentabilidades.

Por su lado, el responsable del área residencial en Europa de M&G Real Estate, Marcus Eilers, ha destacado que la de Zorrotzaurre «es la tercera adquisición de la estrategia M&G European Living Property».

Polémica

No son pocas las voces que vienen criticando el carácter elitista del proyecto Zorrotzaurre, que sin un plan estratégico concreto por parte de las instituciones ha ido desde los primeros años 2000 modificándose en base a las inversiones privadas. Un hito de esto se dio en 2011, cuando la BBK aparcó su plan de construir un rascacielos en la zona sur debido la crisis económica y la delicada situación del sector financiero.

El Ayuntamiento de Bilbo ha insistido en que se trata de un proyecto para transformar Zorrotzaurre en una zona juvenil, universitaria e innovadora. Y aunque sí que se han construido algunas viviendas de VPO, de momento, las únicas universidades que se han instalado, o tienen algún proyecto, son privadas: DigiPen, Mondragon Unibertsitatea y Deusto.

Con esta nueva venta de viviendas vuelve a aflorar la polémica, más en un momento en el que el problema de la vivienda parece urgente y desde distintas instancias se está haciendo un llamamiento a promover el alquiler público y ampliar los parques de vivienda pública.

La gestora de fondos M&G ha comprado a Urbas por 98 millones de euros una promoción de vivienda para alquiler que contará con 314 apartamentos en Zorrotzaurre. Se construye lamentablemente una ciudad a la medida de los grandes intereses inmobiliarios, no de la ciudadanía. pic.twitter.com/vcrIu7TIZ4

— agustin goikoetxea (@goikodeustu) August 9, 2023

Desde EH Bildu han vuelto a recordar que llevan tiempo denunciando que «Zorrotzaurre es un proyecto elitista que no responde a las necesidades de los y las vecinas de la zona», y destaca que esta nueva venta de pisos destinados al mercado privado representa «una oportunidad perdida para avanzar hacia otra modelo de ciudad».

En esa línea, señala que los equipamientos públicos actuales, tales como el polideportivo, la ikastola pública o el ambulatorio «se han quedado pequeños y obsoletos y no dan respuesta a las necesidades actuales del barrio». Por ello, considera que, «en lugar de operaciones urbanísticas especulativas como la que pretenden llevar a cabo, este barrio necesita de manera urgente unos equipamientos públicos y unas zonas verdes que den respuesta a las demandas de los y las vecinas de una forma digna».

«Mientras otras ciudades europeas se están adaptando a las necesidades actuales, el Gobierno municipal de Bilbao sigue sin realizar una apuesta real y ambiciosa para hacer frente a la situación de emergencia climática, a pesar de haberse comprometido a ello, además de seguir empecinado en un modelo obsoleto basado en el cemento», ha añadido la formación soberanista.