Juan María Aburto, alcalde de Bilbo, ha confirmado este viernes en Radio Euskadi el incidente que denunciaron comparseros ante él mismo el pasado martes. Y ha señalado que efectivamente eran dos agentes municipales los que orinaron en una txosna el domingo noche, dando lugar a este altercado que ha crispado una relación ya tensa previamente.

Según su versión, que coincide en gran parte con la que dieron las comparsas en la protesta del martes, a esas dos personas «se les reprende por orinar en una txosna, se les arroja algún katxi de cerveza, hay una especie de pelea y, teniendo conocimiento de ello, entran policías municipales. Luego se identifica que [las dos personas] son policías municipales en su tiempo libre. Podían haber sido médicos, arquitectos o fontaneros... Van a ser sancionados, tendrán un expediente disciplinario».

Pese a esta última afirmación, posteriormente informaciones de agencia han matizado que solo hay sanción para uno de ellos «porque es el que consta, a día de hoy, que orinó en vía pública».

Aburto no ha dado mayor importancia a lo ocurrido: «Lo que pasa es que algunos tienen intereses en incidir en esto». Y preguntado sobre si considera correcta la actuación policial, ha valorado que «entendemos que había una situación de conflicto y la policía entró a resolverlo».

No ha dado detalles sobre qué ocurrió finalmente, pero sí lo hicieron los comparseros el martes, y de modo minucioso. Explicaron que fueron dos comparseras de Kranba las que se acercaron a reclamar civismo a quienes orinaban contra la txosna, y que estas personas, lejos de disculparse, optaron por increparlas con amenazas como «cuando esté de uniforme te voy a hacer la vida imposible, y cuando no, te voy a matar».

Indicaron que acto seguido una treintena de agentes de la Policía Municipal rodearon a las comparseras, entre golpes, mientras las dos personas que iniciaron el incidente huían. Finalmente, municipales con equipamiento antidisturbios las identificaron y las mantuvieron retenidas en la calle durante más de media hora.

Añadieron que cuando llegó el abogado de las comparseras, también le identificaron y no le dejaron acercarse. Y otro dato: uno de los agentes reconoció a las componentes de Kranba que no daba crédito a la desmesura de la violencia policial ejercida contra las comparseras.

Contento con el número de arrestos

Al margen del incidente concreto, en una lectura general Aburto ha felicitado a las policías, tanto a la municipal como a la Ertzaintza, porque «el número de detenciones está siendo muy importante». «Son más que nunca, ese es el dato, en torno a un 30% más que el año anterior», ha reafirmado con satisfacción.

«En algunos momentos los calabozos han estado llenos», ha confirmado el alcalde de Bilbo en relación a algunas informaciones y quejas de sindicatos policiales. En esos momentos concretos los arrestados han sido trasladados desde las comisarías de la Policía Municipal a las de la Ertzaintza. Pero ha matizado sobre estas quejas que «nadie puede pretender que las instalaciones policiales estén diseñadas para estos picos».

Abundando en su diferencia de criterio respecto a las comparsas, el dirigente jelkide ha dicho que antes de Aste Nagusia «tuvo una reunión con la Policía Municipal y nos pidieron menos policías, parece que no les gusta. Pero la ciudadanía nos pide más policía, y yo no voy a atender a las comparsas, voy a atender a la ciudadanía. Yo soy el responsable de seguridad, y de seguridad no voy a hablar con las comparsas. La ciudadanía lo demanda cada día más», ha insistido.