EH Bildu y Elkarrekin Bilbao han presentado diversas enmiendas al proyecto de ordenanza reguladora de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), al objeto de mejorarla y conseguir que «sea realmente útil», contribuyendo a incrementar la calidad de vida de toda la capital vizcaina.

A EH Bildu le preocupa que la ZBE se corresponda «únicamente» con el distrito de Abando-Indautxu, por lo que temen que este hecho «trasladará la intensificación del tráfico a otras zonas de la ciudad». EKologistak Martxan ya avanzó que teme que con esta regulación el tráfico crezca en el entorno de la ZBE.

Por ello, los soberanistas de izquierda proponen que el obligatorio informe de seguimiento de la ZBE analice «de forma diferenciada las calles colindantes» a esta zona, para estudiar la repercusión de las medidas y «detectar o prevenir el efecto frontera o rebote».

Pide también que el control de la calidad del aire se extienda a los barrios colindantes con la ZBE y no se efectúe solo en el interior de la zona.

EH Bildu reclama también que se incorporen a la ordenanza «zonas de especial sensibilidad" para «proteger a los sectores más vulnerables».

«Ordenanza de mínimos»

La portavoz, María Del Río, ha criticado que el Gobierno municipal no haya incorporado esas zonas en la ordenanza, lo que a su juicio «pone de manifiesto una vez más que se trata de una ordenanza de mínimos, realizada sin ilusión ni ambición».

EH Bildu pide que el diseño de dichas zonas de especial sensibilidad –proximidades de centros escolares, hospitalarios o residenciales– incluya «requisitos y medidas de reducción de emisiones más exigentes que los que se establezcan en la zona principal».

«La finalidad de nuestra enmienda es proteger a dichos colectivos, buscando su bienestar y mejora de calidad de vida, con menos contaminación, ruido y tráfico rodado en general», ha destacado la portavoz.

Desde Elkarrekin Bilbao se plantea también efectuar un seguimiento y evaluar las posibilidades de ampliación de bajas emisiones mediante la publicación de un informe anual desde la entrada en vigor de la ordenanza, mientras que el equipo de gobierno PNV-PSE plantea que la evaluación se haga cada cuatro años.

La coalición también sugiere que los criterios a seguir en episodios de alta contaminación atmosférica sean los establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en sus Guías Sobre la Calidad del Aire. La portavoz de Elkarrekin Bilbao, Ana Viñals, ha defiendido que «los valores límite que marca la OMS son más estrictos de cara a garantizar una mejor salud pública».

En cuanto al horario de la restricción de acceso y circulación de los vehículos contaminantes a la ZBE, el grupo municipal propone ampliarlo en una hora. Es decir, que los días laborables, de lunes a viernes, el horario sea de 07.00 a 21.00.

Incluir a los ciclomotores

Otra de las cuestiones que plantea la coalición es incluir a los ciclomotores, para que no queden exentos de restricción de acceso y circulación. «Consideramos que deben disponer también de la etiqueta ambiental al igual que el resto de los vehículos», ha señalado Viñals.

Elkarrekin Bilbao también plantea modificar los plazos de aplicación transitorio de la restricción de acceso y circulación de los vehículos por su potencial contaminante. Lo que propone es que los plazos sean más cortos que los previstos por la ordenanza.

Además, la coalición pide claridad. «La delimitación de la ZBE según el plano no es clara», ha advertido su portavoz. «Por ejemplo, no está claro si el Puente Euskalduna o la calle Autonomía entran o no en la zona propuesta», ha señalado. Por ello, para evitar confusiones, ha solicitado que se indique un listado de las calles (y en su caso indicar si se trata de número pares o impares) que constituyen el límite de la zona.

«Confiamos en que la zona de bajas emisiones sea un primer paso para extender el cuidado de la calidad del aire a todos los barrios de la ciudad», ha afirmado Viñals. La portavoz, asimismo, ha expresado su deseo de «que se escuchen las aportaciones de los sectores ecologistas de la ciudad».