Pello Guerra

Leones para todos los gustos para ilustrar el escudo de Iruñea establecido por Carlos III

Aunque en el Privilegio de la Unión, Carlos III de Nafarroa establecía de una manera muy clara cómo debe ser el escudo de Iruñea tras la fusión de los tres Burgos, la imagen principal de esa enseña, el león, se ha representado de maneras muy diferentes, desde las más realistas a las más básicas.

Peculiar león que aparece en el escudo que preside una copia del Privilegio de la Unión realizada en formato libro en 1533.
Peculiar león que aparece en el escudo que preside una copia del Privilegio de la Unión realizada en formato libro en 1533. (NAIZ)

Hace 600 años y en virtud del Privilegio de la Unión, el rey Carlos III de Nafarroa establecía de manera clara cómo debe ser el escudo de la ciudad de Iruñea, pero el león que conforma su imagen central se ha representado de maneras muy diferentes.

El 8 de septiembre de 1423, el soberano navarro otorgaba el documento que suponía la fusión de los tres Burgos de Iruñea en una sola ciudad, que contaría a partir de ese momento con un escudo en el que la imagen principal es el rey de la selva.

Cuadro de Carlos III de Nafarroa realizado en 1923. (NAIZ)


El león ha sido asociado precisamente a los soberanos, a la nobleza, la fuerza, la majestuosidad y el valor, y con esa imagen, Carlos III parece que quería remarcar que la nueva ciudad surgía precisamente por decisión del monarca. Pero también era una manera de dejar para el futuro un sello en el que figuraba un animal por el que sentía una especial predilección.

En el particular ‘Sendaviva’ medieval que creó en su palacio de Erriberri, no faltaba la presencia de leones, junto a camellos, gamos, avestruces o un lobo. Entre esos animales, Carlos III tenía una especial predilección por su león Marzot o Marlon, con el que se asegura que llegaba a pasear por la sede regia.

Sello con la primera imagen del escudo de Iruñea que aparece en una de las copias del Privilegio de la Unión. (NAIZ)



El león guardado en la Mañueta

También contaba con animales en los jardines de su palacio real de Iruñea, actual Archivo General de Nafarroa. Uno de ellos, cómo no un león, era guardado en la cercana calle Mañueta, donde apareció muerto.

Su fallecimiento fue certificado por el notario Johanco de Janáriz el 23 de agosto de 1418. No se sabe qué le ocurrió a Acen, el judío que se encargaba de cuidar al león fallecido, aunque seguro que la muerte de su particular ‘inquilino’ le generó serios problemas.

Escudo de Iruñea del siglo XVI. (NAIZ)



Teniendo en cuenta esta afición y los vínculos del león con la monarquía en general, no era de extrañar que ese felino dominara la imagen del escudo de Iruñea. Sobre este emblema, en el Privilegio de la Unión se establece que el fondo debe ser de color azul, rodeado por una banda con la armas de Nafarroa. En el centro debe aparecer un león pasante de color plata, con la lengua y las garras de color rojo. Y sobre el animal tiene que figurar una corona real de oro, en señal de que los soberanos de Nafarroa «suelen y deben ser coronados en la iglesia catedral de Santa María» de Iruñea.

Aunque desde 1423 estaba fijado por escrito cómo debía ser el escudo de la capital, la imagen del león ha sido de lo más variada con el paso de los siglos, tal y como se puede comprobar en la exposición ‘A vida de paz et concordia’, sobre el contexto y la importancia del Privilegio de la Unión en su 600 aniversario y que se puede visitar en el Condestable de Iruñea hasta el 30 de noviembre.

Representación del año 1597 del escudo de la ciudad. (NAIZ)



Las imágenes del escudo que se pueden ver en los documentos que se muestran van desde la primera representación, la que figura en uno de los sellos que rubrica el mismo Privilegio de la Unión, a las que se ofrecieron en copias de ese documento en 1533 y otras imágenes también del siglo XVI o del XVIII.

El parecido entre sí de los leones que aparecen en esas imágenes es más bien escaso y resulta evidente que la fidelidad en la representación respecto al animal auténtico más bien brilla por su ausencia y que depende de las habilidades, y del mayor o menor acierto, de la persona que se encargó de realizarlo. Además, en la mayoría de los casos también queda patente que no se ha seguido la instrucción de que su lengua y sus garras sean de color rojo.

Curioso león del escudo de Iruñea que aparece en un paño del Ayuntamiento del siglo XVIII. (NAIZ)



El escudo republicano de la plaza de toros

De las diferentes representaciones del escudo de Iruñea que se conservan desde 1423, hay una que destaca por su singularidad. Se trata de ese emblema en su versión republicana y que, sorprendentemente, sobrevivió tras la guerra del 36 y a los más de 40 años de la dictadura franquista.

Se encuentra en la puerta principal de la plaza de toros, donde fue instalado en marzo de 1935, y, en lugar de las habituales coronas reales, aparecen dos coronas murales, una sobre el conjunto y la otra sobre el león. Un animal que presenta en ese caso un aspecto bastante más fiero y realista del que ha llegado a tener en otros momentos de la historia.

Escudo republicano de Iruñea que preside la puerta principal de la plaza de toros. (NAIZ)