El ministro de Interior español, Fernando Grande-Marlaska, no comparte las preocupaciones de las asociaciones que trabajan junto a las personas migrantes en la comarca del Bidasoa y que explicitó una vez más en la sesión de control al Gobierno de este 19 de diciembre Euskal Herria Bildu.
El senador soberanista Gorka Elejabarrieta preguntó al titular de Interior si cree que se están respetando los derechos de las personas racializadas en el paso entre Irun y Hendaia, para recordarle que «el derecho que tiene toda personas a migrar de forma legal y segura» choca con la situación que se vive en la muga, incluso tras la decisión de París de abrir los pasos de Aldude, Izpegi y Larraine, que han estado cerrados casi tres años.
Es habitual que, no ya en los pasos de Santiago, Behobia y Biriatu, sino también en la recién reabierta pasarela peatonal del puente Avenida, planten guardia los policías franceses cuando no lo hacen los soldados asignados a dispositivos de «vigilancia contra el terrorismo».
La fotografía que acompaña estas líneas fue captada el pasado 10 de diciembre en el acceso desde Hendaia a la pasarela que enlaza a la ciudad labortana con Irun.
«El pasado septiembre, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea condenó las prohibiciones de entrada y las devoluciones en caliente que se venían realizando en los pasos de la frontera en torno al Bidasoa, dando la razón de esa manera a las entidades en defensa de los derechos humanos de las personas migrantes que venían denunciando y nosotros esperábamos que esa condena trajera cambios sustanciales en la gestión de ese paso fronterizo, pero no ha sido así», expuso Elejarrieta para remarcar, de inmediato, que «desde el 31 de octubre se han reforzado los controles policiales, ahora también mixtos, se producen detenciones in situ, devoluciones en caliente y se realiza un control de paso a través de cámaras de vigilancia».
Según resumía el electo vasco, «la tan esperada apertura del puente Avenida, que usted ha mencionado, solo afecta en realidad de manera positiva a la población no racializada».
«Migración segura, legal y ordenada»
Por su parte, el titular de Interior, ya cuestionado por sus actuaciones en la frontera de Ceuta y Melilla, ha insistido en que uno de los principios fundamentales que guían la acción del Gobierno español en materia migratoria es «el respeto a los derechos humanos» y ha asegurado que desde su Ministerio se trabaja políticamente «para conseguir una migración legal, segura y ordenada».
Ha concretado, además, la labor de las patrullas mixtas acordadas en la Cumbre de Barcelona por Emmanuel Macron y Pedro Sánchez.
Según Grande-Marlaska, esas patrullas tienen la misión de «luchar contra la criminalidad organizada, y no de evitar movimientos secundarios, no de actuar contra la migración irregular».
Tras lamentar las muertes en la muga –Elejabarrieta ha recomendado al ministro que vea el documental 'Bidasoa 2018-2023' realizado por Fermin Muguruza–, el titular de Interior ha insistido en que «nosotros nos dedicamos a salvar vidas, a luchar contra las mafias que ponen a las personas más vulnerables en una situación de riesgo para su vida».