No hay en Europa ninguna escuela de negocios especializada en economía social. Nafarroa será la sede de la primera de ellas. El objetivo es comenzar dentro de dos años con este centro pionero. Antes, toca compartir experiencias y buenas prácticas de cooperativas y empresas donde el beneficio económico no es el objetivo principal que se distribuyen por distintos países y regiones de la Unión Europea. Se trata de aprender para poder enseñar después.

Sergio Pérez García, director general de Acción Exterior del Gobierno navarro, explica a GARA que este proyecto de la Escuela de Negocios lo lidera Nafarroa junto con Anel (la asociación que reúne a más de 200 empresas de economía social de la comunidad) y que cuenta con financiación europea, a través de una iniciativa REESES (Reinforce Regional Social Economy Ecosystems and Stakeholders capacity).

«Hemos conseguido que se sumen a este proyecto varias de las regiones más potentes en cuanto a economía social que hay en Europa», comenta Pérez García. Entre ellas, Emilia Romana, el norte de Finlandia o Nueva Aquitania. La CAV, que cuenta con un fuerte sector de economía social, no se ha sumado a la iniciativa.

El director general subraya que el proyecto se ha logrado después de muchos años de trabajo, en los que Nafarroa ha sido pionera en el impulso de la economía social para alinearla con la política de Europa (en 2018, la incluyó en su Estrategia de Especialización InteligenteS4). Y adelanta que tienen expectativas de ampliar el proyecto, sobre todo, después de la aprobación del PERTE sobre economía social.

Una eventual financiación a través del PERTE, no obstante, no está garantizada a día de hoy. De momento, no se conocen los criterios de la convocatoria ni la cuantía de las ayudas a las que se puede aspirar.

Por parte de Anel, destacan que se ha encontrado «un partenariado muy potente» para sacar el proyecto de Escuela de Negocios adelante. Pablo Lansac, gestor de proyectos europeos de la asociación (que reúne a más de 300 empresas navarras), subraya que en Europa hay más de 2,8 millones de organizaciones y entidades de la economía social, que generan casi 14 millones de puestos de trabajo (un 6,3% de la población activa).

«En esta primera fase, que durará dos años, tenemos que analizar cómo son los ecosistemas de cada región y los participantes compartirán su conocimiento y experiencia», aclara Lansac. La idea es que, a través de la Escuela de Negocios, los dirigentes de este tipo de organizaciones puedan mejorar sus capacidades o, incluso, expandir sus modelos.

Aunque la aspiración es que la sede del centro formativo esté en Nafarroa, Anel recuerda que también tendrá carácter descentralizado y que «el componente de digitalización será importante».

El portavoz de Anel añade que lo que buscan las empresas de la economía social es que la UE trace «una hoja de ruta» que palíe las diferencias entre las regiones para que la difusión del modelo de la economía social sea más potente y sencillo de replicar.

Porque, según indica el Gobierno navarro, el otro objetivo que persigue esta línea de trabajo es que estas empresas «tejan redes» de colaboración en línea con el Plan Europeo de Economía Social y la Agenda Europea de Capacidades a nivel regional.

El proyecto que incluye el centro formativo cuenta con un presupuesto de 1.885.230 euros financiado al 80% por el programa Interreg Europe. De ellos, 507.500 euros corresponden a la parte navarra.