Solo un envite ha perdido el Girona ante su público, pero Osasuna se aferra a su reciente mejoría en juego y resultados –diez puntos de doce posibles– para traerse algo positivo de Montilivi.
Y así seguir creyendo en la posibilidad de que, una vez que parece más que encarrillada la permanencia, la escuadra navarra vuelva a pujar por meterse en la lucha por los puestos europeos.
Apoya esa idea el hecho de que el rival está pasando por su único bache prolongado del presente curso, durante el que solo ha obtenido cuatro puntos de los últimos quince en juego.
Por si no fuera suficiente el desgaste que el calendario estaba provocando en el plantel rojillo en forma de dolencias, el derbi contra el Alavés trajo consigo nuevos inquilinos para la enfermería, alguno de ellos con carácter grave.
Fue el caso de Kike Barja, quien se perderá lo que resta de campaña y el inicio de la siguiente tras lesionarse su rodilla izquierda. Además, David García será baja para varias semanas por su lesión en el bíceps femoral.
A ellas hay que sumar la ausencia de Rubén Peña, quien continúa con el proceso de recuperación de su dolencia en el recto anterior del cuádriceps izquierdo, que se produjo frente al Cádiz.
También hay buenas noticias, no sin su dosis de precaución. Jorge Herrando, que también realizó un feo gesto en una de sus rodillas, finalmente ha entrado en la convocatoria.
Está por ver si el joven canterano, que ha aportado solidez a la zaga rojilla en las últimas jornadas, está en condiciones de salir de inicio o Jagoba Arrasate apuesta por reservarle en el banquillo para no forzar la situación.
Aunque no hayan sido los más utilizados de manera reciente, piezas no le faltan en la récamara para armar el eje de la defensa osasunista. Unai García, Juan Cruz y Catena aguardan una nueva oportunidad, con el de Eskirotz como muy probable titular.
Mantener la seguridad atrás –Osasuna solo ha encajado un gol en sus últimos cuatro duelos– resultará clave para salir ariosos de un Montilivi que trae gratos recuerdos, como el ascenso de 2016.
Menos problemas tendrá el técnico de Berriatua para conformar su equipo de medio campo hacia adelante, con muchas opciones de sumar si Ante Budimir prolonga su olfato goleador.
El Girona no podrá contar con Yangel Herrera, Borja García, Toni Villa, Ricard Artero y Joel Roca, si bien recupera al central David López, quien podría formar de inicio junto a Daley Blind, suplente en Mallorca tras superar una lesión.
Otra de las dudas en la formación catalana es quién ocupará la posición en la media punta. Iván Martín, una de las sensaciones del campeonato, y Portu pugnan por hacerse con dicho puesto.
«Pronto se sabrá»
La renovación de Jagoba Arrasate mantiene en vilo al osasunismo, una situación que parece no se va a prolongar mucho en el tiempo. «No se trata de alargar o de ganar tiempo. No son cosas normales. Braulio me traslada, yo lo proceso, pienso, hablo con mi gente, le doy unas vueltas, me sentaré con él y pronto se sabrá», ha señalado el vizcaino al respecto.
«Después de seis años tengo que estar convencidísimo para seguir, porque creo que es lo mejor para Osasuna también, y en eso estamos. Tengo que saber cómo respira el vestuario, cuál es el plan del club, cómo puede ser la planificación, la temporalidad de esa oferta, son muchas cosas», ha añadido.
Ya refiriéndose al partido en Montilivi, el míster rojillo ha manifestado que su equipo debe tener «la personalidad» de atacar al Girona con el objetivo de «llevar la iniciativa» para así hacerles «daño». «Tenemos que intentar que ellos no estén cómodos, porque, si no, disfrutan. Cuando disfrutan, las noticias para los rivales son muy malas».
En cuanto a los últimos resultados, ha apuntado que «están siendo buenos, al igual que el estado de ánimo», por lo que Osasuna va a Girona «con toda la ilusión del mundo» de «hacer un buen partido y demostrar que estamos en un buen momento».
«Tenemos que poner todo eso de manifiesto. Esa mejoría defensiva, esa eficacia y agarrarnos a los partidos como lo estamos haciendo. Tenemos una prueba para ello», ha continuado un Arrasate que piensa que el encuentro ante el segundo clasificado «es una prueba de fuego».
Del Girona, Arrasate ha dicho que es «una gozada verlo jugar. Es un equipo súper atractivo y valiente. En casa, coge muchos riesgos y tiene un montón de argumentos ofensivos, que son difíciles de parar».
En esa misma línea, ha argumentado que «este año han dado un paso al frente con variantes interesantes y difíciles de frenar. Tiene buenos futbolistas con una idea consolidada y un entrenador que cree en eso».
Respecto al bache que está pasando en estos momentos, Arrasate ha contrapuesto que «sigue siendo un equipo muy firme y reconocible. Es un buen partido para poner a prueba nuestra mejoría y nuestra mejora defensiva».