El ministro español de Transportes, Óscar Puente, ha instado a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, a dimitir este mismo jueves después de «haber mentido ayer en directo» al asegurar que era Hacienda la que debía 600.000 euros a su novio cuando este había admitido dos delitos fiscales y pedía un acuerdo a la Fiscalía.

En declaraciones a los medios de comunicación en el Congreso, Puente ha señalado que las explicaciones que dio este miércoles Ayuso tras estallar el caso son «el último clavo en el ataúd político de la presidenta de la Comunidad de Madrid y debe dimitir sin dilación», una opinión compartida por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.

Además, el ministro ve «tremendo y el colmo» que el PP denunciara en 2022 a una serie de empresas por presuntas irregularidades cometidas en la venta de mascarillas «y, entre ellas, estuviera la que le ha pagado las comisiones a su pareja».

Una dimisión «por el bien de la democracia y de los madrileños»

El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, también ha exigido que Ayuso renuncie a su cargo, «por el bien de la democracia y por el bien de los madrileños».

Patxi López, portavoz del PSOE en el Congreso, se ha limitado a apuntar que Ayuso dice muchas cosas en público «y es mejor que venga aquí, a la comisión de investigación, para decirlas: ya le llamaremos para eso».

«Cada día hay detalles más escabrosos»

Desde Sumar, la ministra de Sanidad, Mónica García, ha considerado este jueves que son «insuficientes» las explicaciones que ha ofrecido la presidenta de la Comunidad de Madrid.

«Cada día hay detalles más escabrosos, más sociedades pantalla, más metros cuadrados de pisos pagados con un delito fiscal, acuerdos entre la Fiscalía y entre Hacienda y la pareja de la señora Díaz Ayuso, que al final es quien está disfrutando de esos bienes comprados por su novio», ha declarado en respuesta a las preguntas de los periodistas en el Senado.

Sobre si considera este «un caso turbio», García ha afirmado que «estamos acostumbrados a ellos en la Comunidad de Madrid, alrededor de la señora Díaz Ayuso; es un caso más del PP que da lecciones de corrupción y, sin embargo, la tiene en casa».

El miércoles Ayuso señaló que «no hay trama de facturas ni sociedades pantalla», y se presentó como una víctima al indicar que su pareja está siendo «asediado por todo el poder del Estado» con «una inspección salvaje» y «sacada de quicio».