El PNV pretende acometer un cambio legal rápido que permita ejecutar desahucios en un plazo de 48 horas en casos de ocupación de viviendas ajenas. La propuesta, difundida este domingo por Europa Press, busca modificar la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim) para introducir un nuevo artículo que posibilite que, en los casos de delito de ocupación de una vivienda el juez o tribunal adopte motivadamente «la medida de desalojo en el plazo máximo de 48 horas desde la petición cautelar por la persona física propietaria o poseedora legítima por otro título, sin necesidad de prestar caución, en tanto en cuanto, una vez requeridos los ocupantes del inmueble, no exhiban el título jurídico que legitime la permanencia» en él.

Añade que «acordado el desalojo y antes de su ejecución», será cuando se avise a los servicios competentes para facilitar el realojamiento de los ocupantes «en caso de especial vulnerabilidad o demás circunstancias del caso».

Los jeltzales justifican su propuesta en que «la realidad social evidencia que la ocupación de viviendas ocasiona un evidente perjuicio a sus titulares», además de perjudicar el entorno por causar «problemas de convivencia», riesgos de incendios y una «paulatina degradación del entorno urbano o devaluación de los inmuebles próximos».

No es la primera vez que este tema sale a debate en el Congreso. El PSOE registró una enmienda la pasada legislatura para permitir desahucios en 48 horas, pero limitado a casos de allanamiento de morada, no a personas que no pudieran afrontar el pago de un alquiler o una hipoteca. El PP fue más allá y abogó por permitir desalojos a las 24 horas, mientras Vox habló directamente de dar «una patada en el culo a los okupas».

En su propuesta, en la que se hace referencia al «carácter transgresor del movimiento ocupa», el PNV indica que «la medida cautelar de desalojo tiene no solo por objeto garantizar el buen fin del proceso o el cumplimiento de una sentencia futura, sino dar fin a la comisión del hecho delictivo».

La propuesta de Pradales

Esta iniciativa del PNV en Madrid se ha conocido poco después de que el candidato jeltzale a lehendakari expusiera su punto de vista para atajar el problema de la vivienda. En un acto celebrado en Arrasate, Imanol Pradales se ha comprometido esta mañana a defender la deducción fiscal por vivienda habitual y rechazó cualquier imposición en la elección de vivienda por parte de las administraciones públicas, rehuyendo cualquier medida tendente a regular los precios. Se trataría de fomentar la compra a través de incentivos fiscales, en detrimento, por tanto, del erario, sin afectar a los beneficios de las altas rentas propietarias.