Centenares de personas han hecho cola desde horas antes de comenzar el acto que el cabeza de lista de Junts+ Puigdemont per Catalunya a las elecciones catalanas, Carles Puigdemont, ha celebrado este mediodía en Elna, pequeña localidad de Catalunya Nord desde la que ya anunció su decisión de ser candidato, el pasado 21 de marzo, y a la que ha regresado, este 6 de abril, para presentar su candidatura a las elecciones del 12 de mayo.

Acompañado por la plana mayor de Junts, y los principales integrantes de la candidatura electoral, el acto, abierto al público, ha arrancado pasadas las 12.30 horas.

La lista que encabeza Puigdemont, con ciertas reminiscencias respecto a la de 2017, fecha del último proceso electoral al que Junts concede legitimidad, al entender que la siguiente cita con las urnas tiene la falla de haberse producido ya promulgado el artículo 155.

La lista de Puigdemont como número dos a Anna Navarro, que se presenta por Barcelona. Es un fichaje que llega del mundo empresarial internacional.

En la tercera plaza, también por Barcelona, figura Josep Rull, quien fuera consejero de Territorio del Gobierno que hizo el referéndum y que debió purgar por ello más de tres años en prisión.

En lo que afecta a los otros territorios, Mònica Sales encabeza la plancha de Tarragona, Jeannine Abella la de Lleida, y Sarvador Vergés la de Girona.

Este último ha tomado la palabra para decir que la suya es una lista plural, que «no busca confrontar con otros independentistas sino con el Estado». Y ha calificado al candidato del PSC, Salvador Illa, de «caballo de Troya de Madrid».

Ha sido el último orador antes de que el propio Puigdemont subiera a la tarima, arrancando una fuerte ovación de sus partidarios desplazados a Elna desde distintos puntos del país.

Una lista para el día después

El candidato ha remarcado la trayectoria, la experiencia y la solvencia de una plancha que responde a la aspiración de «tener un país de excelencia».

«No podremos tener un país libre si no tenemos talento», ha remarcado Puigdemont antes de reivindicar «una lista para el día después de las elecciones, para reconstruir un país».

«Queremos servir a la nación, queremos hacer un país en el que merezca la vida vivir, y eso solo puede ser siendo una nación libre», ha destacado antes de censurar el uso de la Justicia para «construir mentiras para perseguir a ciudadanos inocentes» en denuncia de la represión vivida por el independentismo catalán y él mismo a raíz de poner las urnas.

«Lo volveríamos a hacer», ha proclamado, arrancando una sostenida ovación. «Ahora ya saben que cuando Junts dice no, es  no», ha explicado, luego, para defender así «la posición de firmeza» exhibida por su formación en Madrid, «hasta asegurarnos de alcanzar «a la ley de amnistía que necesitábamos».

Puigdemont ha cerrado su intervención animando a los presentes a corear consignas en favor de la independencia antes de que el himno de Catalunya pusiera cierre al acto de presentación de la candidatura con la que Carles Puigdemont aspira a volver a ser president.

El acto de presentación de la candidatura, en las antiguas escuelas de Elna es el primero que protagoniza el expresidente catalán desde que se conociera que se ha trasladado a vivir a la comarca de Vallespir, en Catalunya Nord, dejando atrás su residencia en Waterloo (Bélgica), donde se instaló en 2018, tras abandonar el Estado español.

Su nuevo hogar provisional se sitúa a menos de una hora en coche de su domicilio en Girona.

Sin debate a tres en Catalunya Nord

El candidato de Vox a la Presidencia de la Generalitat de Cataluña, Ignacio Garriga, ha calificado de «humillación para la nación entera» el desplazamiento del expresident desde Waterloo al Vallespir francés que liga con su voluntad de regresar a Catalunya.

«Se evidencia que Pedro Sánchez cometió el mayor acto de corrupción posible que es a cambio de unos votos amnistiar a unos delincuentes», afirmaba Garriga, el vierners, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press.

El PSC rechazó, el mismo día, la posibilidad de celebrar, tal como ha planteado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, un debate entre el candidato republicano, el del PSC, Salvador Illa, y el de Junts, Carles Puigdemont.

Después de que Aragonès emplazara a Illa y a Puigdemont a un debate a tres para el que estaba dispuesto «a ir donde sea necesario», dada la situación procesal del expresidente, los socialistas catalanes han rechazado la propuesta de debatir en Catalunya Nord.