Con los deberes ya hechos, Beti Onak afronta el play-off por el título liguero lleno de ilusión. «Sabemos de la dificultad –se enfrentan al vigente subcampeón liguero en la primera eliminatoria– pero eso no quita la ilusión», constata un Miguel Etxeberria recién renovado. Admite que ya han soltado todo el lastre, la presión por mantener la categoría, aún en la mente la fase de descenso que se les complicó el año pasado. Esta temporada han dado un paso más y han logrado terminar la liga regular en el octavo puesto, por encima de un histórico como Rocasa que está en horas bajas.  

«Tenemos esa mochila de piedras quitada y ahora el equipo puede ser más valiente, queremos competir al máximo, creemos que en casa somos capaces de hacerlo», subrayó el técnico navarro en la rueda de prensa de este miércoles.

El equipo de Atarrabia está a las puertas de un partido histórico y para Eider Rodríguez, el mensaje debe ser el de disfrutar, además de «darlo todo». Beti Onak está completando su segundo curso en la máxima categoría y la capitana considera que han dado «un paso adelante»: «El equipo sigue creciendo, hemos trabajado muy bien estos dos años, este año hubo muchos cambios en la plantilla y nos hemos sabido adaptar a las compañeras».

Eso les ha llevado a terminar la fase regular en el octavo puesto, con el objetivo de la permanencia en el bolsillo y con el regalo de disputar unos play-off en los que tratarán de dar la campanada. Se enfrentarán al Elche, líder de la fase regular y vigente subcampeón de liga. Un Elche que «domina todas las circunstancias», al que le interesa un ritmo rápido y al que tratarán de contrarrestar llevando el juego al posicional. «Tenemos que bordar en todos los aspectos –matiza Miguel Etxeberria–. Hemos trabajado muy bien el repliegue para llevarles a ese juego posicional, que creo que estamos defendiendo muy bien. Tenemos que conceder muy pocos balones fáciles y, aunque nosotras también vamos a plantear un partido para correr, tenemos que evitar que sea un correcalles».

Van a ir arriesgar, a ser valientes, son ambiciosas: «Queremos ilusionar a la gente, que vean que el equipo sigue dando pasos, de que nos vamos acercando a esos equipos de parte media-alta de la tabla y vamos a ser ambiciosos».

Después de tres semanas de parón por los compromisos internacionales, todos los equipos tienen esa nube de incertidumbre que no les deja atisbar demasiada claridad. Etxeberria, por ejemplo, tiene la duda de Isabel Fernández-Agustí que viene arrastrando molestias. De todas formas, la incertidumbre que ronda es más por la pérdida del ritmo de competición «que es lo más difícil de conseguir y hay gente que necesita entrenar mucho para seguir manteniendo el nivel y estos parones luego cuesta arrancar. Pero es la misma situación para ambos equipos».  

Dos competiciones

De hecho, es la misma situación para todas, también para un Bera Bera que se enfrentará el viernes a Aula Valladolid (21.00, Huerta del Rey). Las cinco internacionales se han incorporado esta semana a la dinámica del equipo –«están cansadas, pero están bien»– y estas tres semanas de parón han permitido que Imanol Álvarez recupere a Carmen Arroyo, Anne Erauskin y Alba Menéndez. Sin embargo,  no sabe al 100% cómo llega el equipo a un partido que exige competir con todas las garantías. «No hemos jugado partidos importantes, no entrenas todo el equipo junto durante todo este tiempo y ahora tienes tres días para preparar este patido tan importante. No es la situación ideal para el estado mental del entrenador», explicó en la rueda de prensa de ayer el técnico ermuarra.

Al contrario que el Beti Onak, las donostiarras aspiran a ganar la liga, conscientes de la dificultad que entraña. El año pasado, también con el formato de play-off, fueron eliminadas en semifinales ante el Elche que posteriormente ganó la competición. El Bera Bera ha terminado tercero en la liga regular –el año pasado fue líder con holgura, lo que constata una liga cada vez más igualada y competida– y se enfrentará a un Aula al que le goleó en la última jornada, hace tres semanas y en casa. Para Imanol Álvarez, el de mañana no tendrá nada que ver con el partido de Gasca. «Huerta del Rey es un pabellón que aprieta mucho. Nosotras tenemos calidad pero ellas también, no han quedado muy lejos de nosotras –han sido sextas–. Va a depender de cómo entremos al partido. De como estemos de concentradas, de entrar cuanto antes en la dinámica del partido, sabiendo que va a ser dificil. No tiene ninguna importancia los goles, ni el gol average, son pautas diferenets a lo que estamos acostumbrados a jugar. Hay que ver quién se amolda mejor a esas circunstancias», explica.

Además, el Bera Bera se juega la temporada en prácticamente un mes pues en mitad de los play-off llegará la fase final de la Copa de la que será anfitrión: «Sabemos que si ganamos seis partidos, o nueve, somos campeones de dos competiciones. Ese es el resumen general y el objetivo».