La convocatoria de Euskal Herriko Kontseilu Sozialista (EHKS) en este Primero de Mayo ha incidido en «la necesidad de seguir construyendo el poder obrero contra la sociedad capitalista». La denuncia del Estado «genocida» de Israel y la solidaridad con la causa palestina y su resistencia ha estado muy presente en la movilización.
Encabezados por una pancarta con el lema 'Badago alternatiba, langile boterea eraiki', algunos miles de personas han marchado desde la plaza del Sagrado Corazón hasta la del Gas coreando repetidamente consignas como «Borroka da bide bakarra», «Instituzioen fartsari aurre egin», «Gora iraultza sozialista» o «Borroka da bide bakarra», portando numerosas banderas rojas acompañadas de alguna palestina y vigilados por un destacado despliegue de la Ertzaintza.
Para esta organización comunista, el Primero de Mayo es «un día para reivindicar la tradición revolucionaria del movimiento obrero». Han asegurado, en su declaración con motivo de esta conmemoración, que la lucha por la libertad de la clase trabajadora no es cosa del pasado. «En el contexto actual, más si cabe, la revolución socialista es una determinación política urgente para la proletariado, contra la austeridad, la guerra y la destrucción de los ecosistemas impuestos por la burguesía», han señalado.
«Hacemos nuestro el legado de décadas del proletariado mundial, actualizamos sus enseñanzas y reivindicamos la necesidad de seguir construyendo el poder obrero contra la sociedad capitalista», han defendido.
Han alertado de que la guerra a gran escala se está convirtiendo en una «opción real» para las oligarquías occidentales. «Lo que está en la base de este contexto de guerra es el control sobre los recursos y los territorios, más aún en un contexto de crisis. La gestión capitalista sobre esos recursos trae consigo la destrucción acelerada del planeta y los ecosistemas», han añadido.
Ante una situación de escasez de recursos básicos y un entorno cada vez más contaminado, abogan por situar todas las luchas «en la dirección del socialismo, ya que es el socialismo el que acabará definitivamente contra las guerras entre potencias imperialistas y el que podrá establecer un sistema que permita gestionar la relación entre el ser humano y la naturaleza de forma racional y sostenible».