Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

Una mujer a contracorriente del sistema educativo

MARÍA MONTESSORI
Estado francés-Italia, 2013. Tit. orig.: ‘La nouvelle femme’. Dtora.: Léa Todorov. Guion: Catherine Paillé, Léa Todorov. Prod.: Carlo Cresto-Dina, Grégoire Debailly, Valeria Jamonte. Int.: Jasmine Trinca, Leïla Bekhti, Pietro Ragusa, Rafaëlle Sonneville-Caby.

Fotograma de ‘María Montessori’.
Fotograma de ‘María Montessori’. (NAIZ)

A principios del siglo XX, en Roma, María Montessori codirigió un instituto pedagógico con Giuseppe Montesano, dedicado a innovar en la educación y el aprendizaje de niños con discapacidades síquicas.

Es allí donde llega Lili d'Alency, una cortesana parisina, con su hija Tina, a quien trata de ocultar de la alta sociedad que la rodea.

En una época donde la sociedad consideraba a estos niños como ‘deficientes’, Montessori desafió las normas establecidas con su revolucionario método educativo, demostrando su eficacia incluso en niños sin problemas aparentes. Sin embargo, enfrenta desafíos personales, como la separación de su hijo, que vive en una granja sin ella.

En 2017, Léa Todorov exploró en su documental ‘Révolution Ecole: 1918-1939’ las innovaciones educativas de la época, incluyendo las ideas de Montessori sobre la autoeducación y la libertad en el aprendizaje.

Ahora, en su primer trabajo de ficción, se enfoca en el período en que Montessori trabajó con niños discapacitados, durante su colaboración con Montesano. Para Todorov, este período tenía un significado personal, ya que ella misma era madre de una niña con problemas de aprendizaje similares a los que retrata la película.

Dos mujeres

La decisión de centrarse en dos mujeres, Montessori y la ficticia D'Alency, interpretadas brillantemente por Jasmine Trinca y Leïla Bekhti respectivamente, enriquece la trama al abordar la lucha compartida de ambas contra las limitaciones impuestas por una sociedad dominada por los hombres.

Ambas son madres que enfrentan dificultades para cuidar de sus hijos, pero encuentran en su relación una complementariedad única.

Además, la película destaca las lecciones que los niños reciben, interpretadas de manera natural por actores discapacitados, especialmente Rafaëlle Sonneville-Caby como Tina, la hija de D'Alency. Estas lecciones ilustran un método educativo que requiere atención, paciencia y amor maternal.