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Siemens Energy reemplaza al CEO de Siemens Gamesa y anuncia «ajustes de plantilla»

Siemens Energy reemplazará al actual consejero delegado de Siemens Gamesa, Jochen Eickholt, y abordará medidas de reestructuración, que supondrán «ajustes de plantilla», con el objetivo de afrontar un plan a largo plazo para el crecimiento rentable de su negocio eólico.

Imagen de la sede de Siemens Gamesa en Zamudio.
Imagen de la sede de Siemens Gamesa en Zamudio. (H. BILBAO | EUROPA PRESS)

La energética Siemens Gamesa, con alrededor de 2.800 trabajadores en Euskal Herria, ha nombrado a Vinod Philip como nuevo consejero delegado de la compañía en sustitución de Jochen Eickholt, quien dejará su cargo a partir del 31 de julio, al tiempo que ha anunciado nuevas medidas de reestructuración que supondrán «ajustes de plantilla».

Eickholt ha cedido, de mutuo acuerdo, el puesto de consejero delegado a Vinod Philip a partir del 1 de agosto y abandonará la compañía el próximo 30 de septiembre, según ha anunciado en un comunicado la filial española de Siemens Energy.

Vinod Philip, que hasta ahora ocupaba el puesto de director de Funciones Globales, asumirá el cargo de consejero delegado con el objetivo de integrar la división de energía eólica en la estructura de gestión de Siemens Energy y asumir la responsabilidad operativa.

A partir del 1 de junio, funciones centrales de Siemens Gamesa, como recursos humanos, legal, IT, compras y logística, pasarán a estar bajo la dirección global, después de que a principios de año, departamentos como contabilidad, control e impuestos se fusionaran, por lo que Philip supervisará que el traspaso se realice de un modo ordenado y fluido durante este periodo de transición.

Siemens Gamesa ha anunciado también que pondrá en marcha importantes medidas de reestructuración y de desarrollo «estratégico» a largo plazo por el que seguirá activa tanto en el negocio onshore como offshore con el objetivo de alcanzar el punto de equilibrio en 2026 y volver a la rentabilidad a partir de entonces.

En el caso de la actividad onshore, se centrará principalmente en Europa y Estados Unidos y sus capacidades de producción se adaptarán a esta nueva situación, al tiempo que se combinarán las responsabilidades de este negocio con el de los servicios, para reducir niveles jerárquicos y regular responsabilidades.

Este cambio también supondrá ajustes de plantilla, aunque el objetivo de Siemens Energy es absorber la mayor parte mediante recolocaciones, por lo que espera que el número de empleados se mantenga más o menos constante en los próximos años.

Siemens Gamesa tenía cino plantas en Euskal Herria: Mungia y Asteasu (cuya venta anunció a finales de 2022), Zamudio, Sarriguren y Arazuri. En los últimos meses, los trabajadores han venido denunciando la incertidumbre a la que están sometidos ante la amenaza de pérdida de puestos de trabajo, especialmente en las fábricas de Nafarroa, donde peligran 1.800 empleos.

En 2020 cerró la fábrica de palas de Agoitz, que conllevó el despido de 240 trabajadores.

Previsión de 2.000 millones de euros en pérdidas

En su comunicado, Siemens Energy señala que adopta estas medidas después de presentar unas ganancias de 108 millones de euros en su segundo trimestre fiscal, frente a las pérdidas de 189 millones de euros en el mismo periodo del ejercicio anterior.

No obstante, Siemens Gamesa sigue siendo el gran talón de Aquiles para el grupo, sumando en este trimestre unas pérdidas de 365 millones de euros y con una previsión de unos ‘números rojos’ de 2.000 millones de euros en el total de este ejercicio.

Los problemas arrastrados por Siemens Gamesa llevaron a Siemens Energy a solicitar ayuda financiera al Estado alemán, que avaló al grupo con 7.500 millones de un importe total de 12.000 millones de garantías, de los cuales 11.000 millones de euros se proporcionarán a la compañía a través de un consorcio de bancos, tras anunciar unas pérdidas récord de 4.588 millones de euros en su ejercicio fiscal 2023, lastrada principalmente por su filial eólica.

El año pasado las pérdidas netas de la filial ascendieron a 4.347 millones de euros. Surgida en 2017 de la integración de Gamesa con el negocio eólico de Siemens, la compañía, desde que en 2020 el grupo alemán tomó el control total de la empresa, tras adquirir su participación del 8% a Iberdrola, ha visto como ejercicio tras ejercicio se han sucedido los 'números rojos'.

Así, en el ejercicio 2020 registró unas pérdidas de 918 millones de euros, otros 626 millones de euros en 2021 y 937 millones de euros en el año 2022. El Gobierno español ya anunció el año pasado que estaba trabajando en una posible línea de avales bancarios para nuevos contratos de Siemens Gamesa en el exterior, con la cobertura de CESCE por cuenta del Estado.

Tras conocerse el anuncio de la compañía de reestructuración de la plantilla de Siemens Gamesa, el consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Nafarroa, Mikel Irujo, ha trasladado su preocupación y ha asegurado que mantienen una «interlocución directa» con la empresa con el objetivo primero de salvaguardar todos los empleos.

Ha asegurado que desde el Ejecutivo navarro, tienen clara su apuesta por un «territorio dinámico en el que se invierte en sectores de futuro» como el eólico y en el que entienden que «Gamesa tiene y puede tener cabida para su futuro».