Las negociaciones entre Osasuna y Rubén García (Xátiva, 1993) han llegado a buen puerto, tal y como ha ratificado el propio club anunciando la renovación del atacante de Xátiva por dos temporadas más, hasta 2026, con la opción de prorrogar la relación contractual hasta junio de 2027.
De este modo, el futbolista continuará en la entidad rojilla, al menos, dos cursos más; ampliando hasta una octava temporada su trayectoria en el club. Su cláusula de rescisión queda establecida en 8 millones de euros.
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— C. A. OSASUNA (@Osasuna) May 23, 2024
O, al menos, lo había. pic.twitter.com/X7ZWsij1M5
Rubén García Santos es uno de los supervivientes de un proyecto que se inició con el equipo en Segunda División. Su llegada en la temporada 2018/19 ofreció un salto de calidad determinante en la consecución del ascenso. En las cinco campañas siguientes, su aportación ha tenido un papel muy relevante en la consecución de cinco permanencias holgadas en la máxima categoría, así como un subcampeonato de la Copa y una clasificación para Europa.
«Durante su trayectoria en Osasuna, la afición ha podido disfrutar de su incuestionable capacidad técnica, a la que ha sumado sacrificio defensivo y 26 goles, una cifra muy relevante para un futbolista que ocupa la segunda línea del ataque», indica el propio club iruindarra, a lo que añade que «al margen de su extraordinario rendimiento, Rubén García ha sido un ejemplo de compromiso, profesionalidad y comportamiento, lo cual le ha convertido en un futbolista querido y respetado por el osasunismo».
El jugador valenciano no podrá celebrar esta celebración en el verde de El Sadar, no al menos vestido de corto. Y es que las pruebas médicas a las que fue sometido esta semana confirmaron que presenta una lesión muscular en el aductor de la pierna derecha, contratiempo que sufrió en el Wanda Metropolitano, por lo que deberá guardar reposo.