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Bilbo

Borja Cobeaga inicia el rodaje de ‘Los aitas’, una ‘road movie’ muy bilbaina

Ha comenzado el rodaje de ‘Los aitas’, la nueva comedia dirigida y coescrita por Borja Cobeaga (‘Pagafantas’, ‘8 apellidos vascos’...) y Valentina Viso (‘La Voluntaria’, ‘Uno para todos’), una ‘road movie’ ambientada en el Bilbo de finales de los 80 y entre cuyos protagonistas está Sofía Otero.

Parte del grupo de padres desastrosos que protagonizan esta historia.
Parte del grupo de padres desastrosos que protagonizan esta historia. (David HERRANZ)

En la periferia obrera del Bilbo de finales de los 80, un equipo infantil de gimnasia rítmica tiene la oportunidad de participar en un campeonato en Berlín. Ante la imposibilidad de que las madres acompañen a sus hijas, la tarea recaerá en los padres, que no parecen muy interesados en el viaje, ni en ese deporte, ni incluso en sus propias hijas.

Así arranca la sinopsis de ‘Los aitas’, la nueva comedia dirigida por el bilbaino Borja Cobeaga y que ha comenzado a rodarse ya. Fecha de estreno prevista: 2025.

El grupo de padres está formado por Quim Gutiérrez (‘El cuerpo en llamas’, ‘Amor de madre’, ‘Primos’), Juan Diego Botto (‘En los márgenes’, ‘No me gusta conducir’), Ramón Barea (‘Cinco lobitos’), Iñaki Ardanaz (‘Ane’, ‘Ana de día’) y Mikel Losada (‘Ane’, ‘García y García’).

Las jóvenes son Sofía Otero (la premiadísima protagonista de ‘20.000 especies de abejas’), Irati Goitia, Mara Garcés Renedo, Vera López, Irati García y el actor Aitor Sanz Álvarez. En el reparto, también Laura Weissmahr (‘Cardo’).

«En 1989, año en que transcurre ‘Los aitas’, yo tenía 12 años. Es la edad que tienen las chicas protagonistas de la película –explica Borja Cobeaga–. Soy padre y este es el primer guion que escribo sobre la paternidad, pero me he dado cuenta de que la historia va sobre todo de ser hijo o hija. De cómo el modelo de paternidad cambió entre la generación de mi padre y la mía. La forma de contarlo es a través de una comedia tierna. ‘Los aitas’ es una película de carretera que busca emocionar y hacer reír».

«Nunca había hecho una película tan coral y ese es uno de los desafíos del proyecto –añade–. Pero también tiene la ventaja de que así trabajo con un montón de actrices y actores. Desde el perfecto combo de padres al que dan vida Quim, Juan, Mikel e Iñaki al reparto infantil. Nunca había trabajado con niñas y niños protagonistas y estos me lo están poniendo fácil. Es la primera vez que trabajo con Laura Weissmahr y es perfecta para el papel de entrenadora. Y es la sexta o séptima vez que Ramón Barea está en algo mío. Y está perfecto, como siempre».