La alcaldesa de Gasteiz, Maider Etxebarria (PSE), ha valorado positivamente «el avance significativo» que supone la aprobación del estudio informativo del proyecto para la llegada y salida del tren de alta velocidad a la ciudad, conocida esta mañana, pero ha recordado al ministro Óscar Puente que «hay un protocolo aprobado» sobre cómo pagar el soterramiento de la estación.

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible aprobó el jueves este estudio, en el que se incluye una estación soterrada, y destacando que con ello se resuelve definitivamente la entrada del TAV a la capital alavesa, aunque queda pendiente definir el llamado «nudo de Arkaute», desde donde partirán las conexiones de la alta velocidad con el resto de herrialdes vascos.

Se suma a otras muchas cosas sin definir, como la conexión del llamado «corredor navarro» con la «Y vasca» y cuándo se podría llegar hacia Madrid y París, dados los retrasos y paralizaciones al sur y norte de Euskal Herria.

Dos dudas de Etxebarria

La alcaldesa se ha mostrado «bastante satisfecha» con que se haya aprobado el estudio informativo, pero ha dicho que es necesario «estudiar con detalle» este documento para saber si el TAV operará en un primer momento en Gasteiz desde una estación provisional o desde la ya definitiva bajo tierra. [Los avatares en torno a este soterramiento, recogidos en este reportaje de Ion Salgado en 2021]

También se ha remitido al estudio para poder cuantificar el coste de la entrada del TAV en la ciudad y del soterramiento de la estación. En este sentido, y a preguntas de los periodistas, ha recordado que aunque no se sepan las cantidades sí está claro cómo se sufragará la infraestructura.

Con esta afirmación Etxebarria se ha posicionado ante el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, quien hace dos semanas apostó por hacer los soterramientos ferroviarios «solo en los casos necesarios» y avanzó que si las ciudades quieren soterrar las vías férreas deberían asumir un 70% del coste.

«Hay un protocolo aprobado» al respecto, ha recordado la alcaldesa, y en ese reparto se establece que el Ministerio sufragará el 50 % del coste, el Gobierno de Lakua el 25 %, el Ayuntamiento el 15 % y la Diputación el 10 %.

Arriola, sin problemas

El tercer interlocutor en este proceso es Lakua, cuyo consejero Iñaki Arriola (también del PSOE) no ha mostrado pegas y solo ha expresado satisfacción.

El máximo responsable de Transportes en la CAV ha calificado este paso como «un punto de inflexión, un avance significativo para el desarrollo del tren de alta velocidad en Euskadi» porque «con ello se pone fin a la fase puramente administrativa y entramos en la constructiva».

Ha añadido que se trabaja ahora «intensamente» para solucionar el tema del nudo de Arkaute y «esperamos que la encomienda esté lista en los próximos meses».