Cortes provocados en varios puntos del Hexágono están afectando al funcionamiento de las telecomunicaciones en el Estado francés, en lo que supone el segundo sabotaje contra las infraestructuras desde que comenzaron los Juegos de París.
La secretaria de Estado de la Economía Digital, Marina Ferrari, ha explicado en un mensaje en su cuenta de X que los desperfectos que se han detectado esta noche «han afectado a nuestros operadores de telecomunicaciones» y «tienen consecuencias localizadas en el acceso a la fibra, la telefonía fija y la telefonía móvil».
La emisora France Info ha indicado que los departamentos afectados son los de Hérault, Bocas del Ródano, Aude, Oise, Meuse y Drome, que están repartidos en puntos muy alejados de la geografía francesa.
Ferrari, que ha condenado «con la mayor firmeza» lo que ha calificado de «actos cobardes e irresponsables», ha señalado que el Centro para las Comunicaciones Electrónicas de Defensa está cooperando con los operadores para restablecer por completo las comunicaciones y los servicios.
Este nuevo sabotaje se produce días después del perpetrado contra la red ferroviaria de alta velocidad, que este lunes ya ha vuelto a operar con normalidad.
El ministro galo de Interior, Gérald Darmanin, ha dicho este lunes que este tipo de sabotaje «es el modo tradicional de acción de la ultraizquierda».
Como consecuencia de los sabotajes, solo el viernes se tuvieron que anular 200 de los 750 TGV. Vergriete ha precisado esta mañana que en total unas 100.000 personas se han quedado privadas de viajar en tren durante el fin de semana por este motivo.