David García ya es jugador del Al-Rayyan de Qatar, cerrando una etapa de más de 20 años en Osasuna, culminadas con la capitanía del primer equipo y el logro de la internacionalidad. El central ha cumplido su deseo de firmar por una entidad que según se ha filtrado cuadruplicará su ficha actual en los próximos cuatro años. De la nota del club navarro se desprende que el futbolista ha acabado poniendo algo de dinero para facilitar el acuerdo entre clubes.

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— AlRayyanSC | نادي الريان (@AlrayyanSC) August 1, 2024

La entidad rojilla percibirá por la operación 8,75 millones de euros fijos en un traspaso que podría superar los 10 millones en caso de cumplirse las variables deportivas incluidas en el acuerdo entre las partes, explica Osasuna, con su habitual transparencia en estos casos.

Así, detalla que el club catarí «aportará de inicio 7,5 millones de euros y se compromete a abonar 0,5 millones más al término del contrato del futbolista en el caso de que no se haya cumplido ninguna de las variables recogidas en el contrato. Además, el jugador abonará a la entidad 750.000 euros. Estas cifras dan como resultado un ingreso garantizado de 8,75 millones de euros, a los que se pueden sumar diversas variables deportivas por éxitos en las diferentes competiciones en las que participa el Al-Rayyan S. C. y que, en caso de cumplirse en su totalidad, elevarían la cantidad total por encima de los 10 millones, incluyendo ahí la cantidad aportada por el jugador».

En lo deportivo, la pérdida es muy relevante para el club navarro, como ha admitido este miércoles en Zubieta el nuevo entrenador, Vicente Moreno, que confiaba aún en que Davíd García cambiara de idea. No ha sido así y Osasuna se ha visto forzado a la mejor venta posible. De hecho, es la segunda más elevada de su historia tras la de Raúl García al Atlético de Madrid en 2007, pero muy por debajo de su cláusula de rescisión (20 millones).

Se busca ahora recambio, para el que se asume que habrá que pagar buena parte de lo que recaude por el hasta ahora 5 rojillo. Suenan especialmente dos nombres: el alavesista Abqar, por un lado, y la opción aparentemente algo más barata de Boyomo, joven central camerunés del Valladolid.

Desde los 9 años en Taxoare

Osasuna destaca en la hora del adiós David García llego a las categorías inferiores con 9 años y debutó con el primer equipo en Segunda División en 2014, «año muy complicado para la entidad y en el que logró marcar uno de los goles que dieron la permanencia a Osasuna en Sabadell en la última jornada de Liga», además de otro anterior al Recreativo en la penúltima jornada en El Sadar.

Tras ello, participó de forma importante en el ascenso del equipo de la máxima categoría en la 2015-2016 y vio descender a Osasuna en la temporada siguiente. Cedido a la Cultural y Deportiva Leonesa en el mercado de invierno de la temporada 2017-2018, desde su regreso al primer equipo se asentó como una de sus piezas más importantes. «De su mano, la entidad recorrió el camino de la casi desaparición al regreso a la máxima categoría de nuevo en la 2018-2019. Ya con el brazalete de capitán, el equipo logró un subcampeonato de la Copa del Rey y una clasificación para la Conference League y la Supercopa de España. Además, en 2023 debutó con la selección española absoluta», recuerda.

«La entidad desea agradecer muy especialmente a David García sus años de entrega al club y le desea mucha suerte en su futuro reto profesional. El futbolista, que se encuentra en Catar en estos momentos, se despedirá de la afición rojilla a su regreso», apunta.

De Sabadell a la Cartuja

«Es mi vida. Llevo desde los 9 años aquí, es el club de mi tierra. Siempre soñé con ser futbolista de Osasuna, es todo en lo que me he convertido, la persona que hoy soy», dice el defensa de Ibero en una entrevista concedida al club.

Recuerda que en la base no era de los más «talentosos», pero que con esfuerzo, ilusión y constancia se fue haciendo un hueco hasta poder tener una oportunidad con el primer equipo.

«Tienes 18 años y estaba a las puertas del primer equipo hasta que al final tuve la oportunidad de hacer la pretemporada. Es uno de los años más importantes de la historia de Osasuna. El club estaba desestructurado con muchos problemas económicos», dice el futbolista de 30 sobre sus inicios.

De su gol en Sabadell, que preludió al de Javier Flaño que dejó a Osasuna en Segunda División in extremis (2-2), García revela: «Me acuerdo de que los nervios eran increíbles. Sentía una presión muy grande, sobre todo porque eras consciente de la repercusión que tiene para toda Pamplona y Navarra».

Sobre la etapa dorada de Osasuna, indica que «tampoco soy consciente de lo que he hecho en mi carrera todos estos años y cuando me retire creo que podré poner en perspectiva todo. Parece que ahora vamos con el piloto puesto y que nos cuesta valorar lo de años anteriores».

Tras el asentamiento en Primera de estos años llegó el mayor hito, la final de Copa en Sevilla ante el Real Madrid. El ya exrojillo considera que «poder vivir ese momento como capitán fue algo increíble. Me lo llevo marcado porque ha sido un momento muy feliz por cómo se dio, con muchos partidos, prórrogas y luchando hasta el último minuto».