Agustin Goikoetxea
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Actuaciones contra manteros en Bilbo cuestionan el Pacto de Seguridad

Aste Nagusia concluyó con otra actuación de la Policía Municipal de Bilbo contra los manteros, a quienes integrantes de las comparsas y transeúntes arroparon con un muro popular. La redada cuestiona el espíritu del Pacto de Seguridad Ciudadana rubricado por la mayoría del Consistorio.

El Gobierno de Juan Mari Aburto no parece capaz de resolver el fenómeno de la venta ambulante y sus medidas de carácter represivo contradicen el espíritu del Pacto de Seguridad Ciudadana 2024-2027, generando aún más problemas.

Las repetidas intervenciones policiales están provocando la reacción ciudadana, como la que se produjo en la tarde del domingo, poco antes de la despedida de Marijaia, cuando un muro popular protegió a los migrantes africanos que trataban de vender su mercadería en el puente del Arenal.

Comparseros y transeúntes que observaron la intervención de los policías municipales arroparon a los manteros, lo que acrecentó la reacción violenta de los agentes. Poco a poco, los guardias, en cuyo apoyo llegaron miembros de la Brigada Móvil de la Ertzaintza, se fueron replegando, permitiendo que Aste Nagusia terminara en paz.

Es la enésima actuación policial contra ese colectivo de migrantes, que distintas organizaciones políticas, sociales y sindicales consideran «racistas».

El operativo –el tercero que se desarrollaba en escasas jornadas– se saldó, según fuentes del Consistorio, con la identificación de una persona por grabarlo, negarse a identificar e «incitar» a los participantes a que «se echaran encima de los agentes».

Ayer, Bilboko Konpartsak denunció la «actitud agresiva» de la Policía Municipal y destacó «el coraje cívico de cientos de comparseras y ciudadanas que, unidas de la mano, y haciendo frente a los violentos de forma pacífica, tomaron el puente del Arenal y se mantuvieron firmes hasta la marcha de la policía, a pesar de las amenazas y el temor».  Las comparsas valoraron «muy positivamente» esa reacción.

«En vísperas del inicio de las fiestas dijimos que no nos quedaríamos de brazos cruzados ante las agresiones, y adelantamos que haríamos frente a todo tipo de agresores, incluidos los racistas y xenófobos. Las gentes de Bilbao se han unido a este objetivo, y han dado una gran lección de civismo», enfatizaron.

«El Arenal debe ser un espacio de convivencia pacífica y de libre expresión, especialmente durante Aste Nagusia, y cuidar de que así sea es responsabilidad de todas, todos y todes», sostuvieron.

EH Bildu pide una reunión con Aburto

Tras lo sucedido, EH Bildu pedirá una reunión al alcalde para buscar una solución a las últimas actuaciones policiales contra manteros, que la portavoz soberanista, María del Río, consideró «totalmente desproporcionadas y que ponen en riesgo el modelo festivo popular». Manifestó que «estas actuaciones son totalmente contrarias al modelo de Policía de proximidad».

«Estos hechos van en contra de la lógica del Pacto de Seguridad que acabamos de firmar en julio. Amaia Arregi debe actuar con responsabilidad para que las actuaciones policiales se ajusten a la filosofía del pacto», dijo.

Para buscar una solución, adelantó que pedirán una reunión urgente con Juan Mari Aburto. «Hay que dar una respuesta a la situación de los manteros y esa respuesta tiene que ser política y social, no policial», destacó.

Antes de Aste Nagusia, la concejala de Igualdad, Convivencia, Cooperación e Inmigración, la jeltzale Kontxi Claver, mantuvo una reunión con la asociación de manteros y manteras Mbolo Moye Doole y otras organizaciones para abordar el fenómeno del «top manta».

El Gobierno municipal PNV-PSE analiza la situación, pero sus únicas iniciativas son de índole represiva.