La bodega Luis Cañas, dirigida actualmente por Juan Luis Cañas y su hijo Jon, recoge el testigo y el saber hacer de una familia de gran tradición viticultora, que en los años 60 se lanzó a embotellar su propia producción, de la mano de Luis Cañas y Ángeles Herrera, los nombres propios que dan titularidad al origen de esta bodega.

Con ese paso adelante, Luis y Ángeles se convirtieron, sin pretenderlo, en los precursores del modelo de bodegas de carácter familiar, con una producción propia, comercializada con su propia marca, y elaborada a partir de uvas de cercanía –el denominado vino de «terroir»–, un modelo que siguen en la actualidad los herederos de la bodega con sus viñedos radicados en un radio de 4,5 kilómetros alrededor de la bodega radicada en Villanueva-Eskuernaga, en pleno corazón de Rioja Alavesa.

Cada generación ha ido aportando conocimiento, valores y capacidad de adaptación para elaborar, cada vez mejor, unos vinos que transmiten la esencia de Rioja Alavesa y la personalidad de esta familia, forjada durante generaciones a fuerza de trabajo, ilusión y pasión por lo bien hecho.

La gama de vinos de la bodega Luis Cañas que podemos encontrar en las tiendas de EROSKI se centra en cuatro referencias: un blanco joven, un tinto de maceración carbónica, un crianza y un reserva.

El blanco 2023 está elaborado mediante fermentación y posterior crianza sobre lías durante cuatro meses, a partir de variedades tradicionales como Viura (85%), Malvasía riojana (10%) y Tempranillo blanco (5%) procedentes de viñas certificadas localizadas principalmente en Villabuena, Samaniego, Leza, Navaridas y Baños de Ebro.

El tinto de maceración carbónica 2023 está elaborado mediante este método tradicional muy arraigado en Rioja Alavesa, que consiste en dejar fermentar los racimos y granos enteros junto con el raspón, sin despalillar, y que da como resultado un vino muy frutal y espectacularmente refrescante.

El tinto crianza 2021 está elaborado a partir de la variedad Tempranillo (90%), con un pequeño porcentaje de otras variedades tradicionales como Garnacha, Graciano, Mazuelo, Viura y Rojal. Tiene una crianza de doce meses en barricas de roble francés y americano.

Por último, el tinto reserva 2018 está elaborado a partir de variedades tradicionales como Tempranillo (95%) y Graciano (5%) de viñas localizadas en un radio de 4,5 kilómetros alrededor de la bodega, con diferentes orientaciones y altitudes, que aportan gran variedad de matices. Tiene una crianza de 18 meses en barricas de segundo año.

Todos y cada uno de ellos tiene su momento, su protagonismo, y tan solo demandan la oportunidad de expresar en una copa todo su potencial.