
Miles de personas (22.000 según la Guardia Urbana y 170.000 según los organizadores) se han manifiestado este sábado en Barcelona, convocadas por el Sindicato de Inquilinas, para exigir una bajada del 50 % de los alquileres y para llamar a una huelga de alquileres si no mejora la situación habitacional.
La manifestación, que se ha iniciado hacia las 17:00 en la plaza Universitat bajo el lema ‘S’ha Acabat!’ (¡Se ha acabado!), cuenta con el apoyo de más de 4.000 entidades, 60 comités y más de 2.000 personas implicadas en sus preparativos.
Entre las organizaciones participantes, se encuentran los sindicatos laborales CCOO y UGT, organizaciones como el ANC y Òmnium Cultural o colectivos como Las Kellys o el Sindicato de Manteros, entre otras muchas. Entre los partidos que respaldan la manifestación, están ERC, Comuns y la CUP.
Encabezados por una pancarta con el mensaje ‘Se ha acabado, bajemos los alquileres. Por una vivienda digna para todos’, los manifestantes han lanzado consignas como «No toleraremos más desahucios», «Ni especuladores, ni bancos, ni fondos buitre» o «La vivienda, gratuita y universal».
Hacia una huelga de alquileres
«No puede ser que los inversores lleguen a nuestras ciudades y jueguen con los pisos como en el Monopoly», ha afirmado la portavoz del Sindicato de Inquilinas, Carme Arcarazo, en declaraciones a los periodistas antes del inicio de la manifestación.
Es por ello que Arcarazo ha anunciado que, a partir de mañana, el sindicato «caminará hacia una huelga de alquileres»: «Si nos unimos, tenemos mucho más poder que cualquier político o rentista», ha destacado.
Las peticiones del Sindicat de Llogateres son cuatro: en primer lugar, exigen una reducción del 50% en los alquileres. La segunda demanda busca la implementación de contratos indefinidos «para evitar la inseguridad y el chantaje» al finalizar cada arrendamiento.
Además, solicitan recuperar viviendas vacías, pisos turísticos y alquileres de temporada para destinarlos al uso residencial. Finalmente, el sindicato pide acabar con la compra especulativa de viviendas, prohibiendo la adquisición de propiedades con fines no residenciales y gravando la multipropiedad para evitar la concentración de viviendas en manos de unos pocos.
En Barcelona, el precio de los alquileres firmados en el segundo trimestre de 2024 es casi un 70% más alto que en el mismo periodo de 2014. Hace diez años, el alquiler medio era de 667,89 euros, según datos de la Agència Catalana de l'Habitatge basados en las fianzas depositadas en el Institut Català del Sòl (Incasòl). Hoy, esa cifra ha aumentado a 1.131,75 euros.
Zornotza, la landa de los rojos

Aplausos e insultos a Jone Laspiur por criticar ‘La infiltrada’ y las infiltraciones policiales

«No hubo ataque exterior, el apagón es producto de la codicia de las grandes eléctricas»

LAB denuncia que Metro Bilbao ha contratado a la empresa israelí I-SEC Aviation Security
