Las encuestas no auguran cambios de poder en el Gobierno de Dublín
Fine Gael y Fianna Fáil, los partidos conservadores en la coalición de Gobierno en Irlanda, encabezan las encuestas a dos semanas de las elecciones generales, con Sinn Féin en un tercer puesto. Los sondeos apuntan que el 29 de noviembre los electores irlandeses elegirán más de lo mismo.
Meses de rumores se transformaron en realidad cuando a pocos días de la presentación de los presupuestos generales para 2025 los socios de la coalición en el Gobierno de Dublín empezaron a elucubrar sobre las posibles fechas para la convocatoria de elecciones generales, apuntando desde el inicio al 29 de noviembre.
Para cuando el primer ministro irlandés, Simon Harris, realizó el anuncio oficial el 8 de noviembre, los primeros carteles ya habían comenzado a invadir los espacios públicos.
La estrategia de esta convocatoria es clara: aprovechar el tirón de los presupuestos, con pagos extra para aliviar el impacto del alto coste de la vida en Irlanda, y de la caída electoral de Sinn Féin, que ha visto como su intención de voto ha descendido a menos de la mitad durante este año.
Por eso, si el escrutinio refleja lo que estos días muestran las encuestas, las cosas no cambiarán demasiado en Irlanda, ya que repetirán los dos partidos conservadores irlandeses, Fine Gael y Fianna Fail, que hasta la formación de la actual coalición se habían alternado en el Gobierno de la república irlandesa desde su independencia en 1921.
Las encuestas más recientes ponen en cabeza a Fine Gael, con un apoyo de 24,7% de las personas encuestadas, seguido por Fianna Fáil, con un 21,45%, y con Sinn Féin en un tercer lugar, con el respaldo del 18,6%.
La caída de Sinn Féin se enlaza con un cambio en su estrategia política en relación con la migración y con la legislación sobre los crímenes basados en conductas de odio, en la que coquetea con demandas en las antípodas de la izquierda, y con la decisión del Ejecutivo de Belfast, liderado por la republicana Michelle O’Neill, de denegar el acceso a bloqueadores hormonales a los jóvenes transgénero.
Analistas políticos y votantes de izquierda apuntan que, en este intento de ganar votos a la extrema derecha, Sinn Féin ha perdido el apoyo de sectores progresistas y, particularmente, de los jóvenes, mucho más sensibilizados con la inmigración y el apoyo al colectivo transgénero.
Precisamente, muchos de esos candidatos de extrema derecha que no tuvieron demasiado éxito en los comicios locales de junio se preparan ahora para llevar su discurso fascista al Parlamento irlandés, donde ya han encontrado voces entre algunos diputados independientes.
A ellos se une Gerry “the Monk” Hutch, en libertad bajo fianza tras su arresto en Lanzarote a finales de octubre acusado de blanqueo de capitales. Anteriomente, fue absuelto en Irlanda de urdir la planificación de un ataque en un hotel de Dublín que se saldó con la muerte de un hombre asociado con una organización criminal rival liderado por la familia Kinahan.
Así, si las encuestas de opinión no yerran, el abandono de la política de algunos pesos pesados de Fine Gael, la crisis de la vivienda, el alto coste de la vida, las carencias en sanidad y educación... no afectarán al partido conservador, que volverá al poder, aunque deberá repetir su coalición con Fianna Fáil para formar un Gobierno estable.
En el caso de la vivienda, una de las cuestiones claves de estos comicios, Fina Gael ha presentado un plan para la construcción de 40.000 viviendas en Irlanda, pero su manifiesto incluía fotos de parcelas en construcción que no se encontraban en Irlanda o creados con la ayuda de inteligencia artificial.
Analistas políticos y votantes de izquierda apuntan que, en este intento de ganar votos a la extrema derecha, Sinn Féin ha perdido el apoyo de sectores progresistas y, particularmente, de los jóvenes.
Por su parte, Fianna Fáil hace hincapié en la necesidad de que la gente vuelva a vivir en nuestras ciudades y pueblos prometiendo medidas para fomentar la habilitación de viviendas en los espacios situados sobre los comercios.
El Partido Verde ha anunciado propuestas para volver a habilitar casas abandonadas, mientras que el Partido Laborista ha presentado una propuesta para ofrecer mayor seguridad a las personas que optan por el alquiler.
La líder de Sinn Féin, Mary Lou McDonald, por su parte, promete una reducción en los alquileres y la prohibición de que estos se incrementaran durante tres años.
A pesar de que esta campaña se ha desarrollado durante la cumbre del clima COP29, la agenda verde y la acción contra el cambio climático no están ocupando un papel importante en las agendas de los partidos, si bien los verdes irlandeses han pedido un debate de los líderes de los partidos sobre esta cuestión.
El ataque israelí contra la Franja de Gaza es otra de las cuestiones que los activistas sociales luchan para que no caiga de la agenda política. Precisamente, la coalición de Gobierno desestimó la oferta de los grupos de la oposición de donar su tiempo en el Parlamento de Dublín para facilitar la aprobación de la ley que oficialice el boicot a los productos que provengan de las ilegales colonias israelíes.