El Museo de Nafarroa ya alberga en su renovada sala de Prehistoria la Mano de Irulegi, que ha sido instalada en ese lugar en un emplazamiento provisional y en la que aparece todavía de forma descontextualizada.
La sala se encuentra en una zona subterránea de la entidad y una vez en el interior, hay que dirigirse al fondo, donde se ve en el lateral derecho, acompañada de un panel con información sobre la pieza y con una pantalla en la derecha en la que se va ofreciendo diferentes detalles sobre el lugar y el contexto de su hallazgo.
A escasa distancia de ese espacio, Mattin Aiestaran, director de las excavaciones de Irulegi, en declaraciones a NAIZ durante la presentación de esa nueva ubicación, ha agradecido el hecho de que «la Mano ya se pueda ver en el Museo de Navarra, además con las condiciones óptimas, con la vitrina adecuada, con sus normas de seguridad, humedades, temperaturas... todo este control es fundamental con una pieza tan importante».
Sin embargo, ha lamentado que la pieza quede en «una situación un poco descontextualizada, porque tal vez debería estar en otro punto. Le faltan más piezas de Irulegi, de contexto arqueológico, porque además está en la sala de Prehistoria y no donde está la Edad del Hierro. Aunque a través de la información que hemos preparado, sí que se dan unas mínimas explicaciones».
Al respecto, puntualiza que desde la dirección de Museo de Nafarroa han trasladado a los comisarios de la Mano que «esta es una ubicación previa a una definitiva, pero que la han querido enseñar y disponer con la celeridad que mandaba la demanda de la gente que quería verla».
De hecho, el museo se encuentra inmerso en unas obras para mejorar su eficiencia energética que arrancaron a mediados de noviembre y que se prolongarán al menos hasta octubre de 2025, de tal manera que la de Prehistoria es una de las pocas salas que se pueden visitar.
Por lo tanto, el actual emplazamiento de la Mano de Irulegi «no es el definitivo». De cara a su ubicación definitiva dentro del Museo de Nafarroa, que sería «competencia del museo y del Gobierno de Navarra», Aiestaran aboga porque la pieza «esté acompañada de elementos propios de esa cronología y de ese mismo yacimiento y circundantes. Siempre en ese contexto de Edad del Hierro final, comienzos de la época romana, para que esta pieza se pueda entender en su contexto cronológico y geográfico».
Ofrenda a la diosa vascónica Sorioneke
En la información que se ofrece en estos momentos, aparece la nueva interpretación que se está dando al texto vascónico que aparece grabado en la Mano de Irulegi y que, según explica el director de las excavaciones de Irulegi, se debe «a las aportaciones que nos han ido realizando otros filólogos y que se han sumado al primer análisis que se hizo en 2022 por parte del equipo de Gorrotxategui y Velaza»
Ese estudio más en profundidad ha permitido localizar un verbo al final de la inscripción. Se trata del término ‘eraukon’, que puede tener una relación con el actual verbo en euskara ‘eradun’, «que vendría a significar dar o le da».
En relación con el primer término de la frase grabada en la Mano, del que ya se había ofrecido una posible explicación, Aiestaran recuerda que la inscripción se escribió dos veces, de manera grafiada y también punteada. En el primer caso, «esa palabra aparece como ‘Sorioneke’, mientras que en la punteada es ‘Sorioneku’. Tenemos dos versiones, lo que supone una dificultad añadida, aunque en las dos son claros los componentes ‘Sori’ y ‘on’».
Tomando como referencia la versión de Sorioneke y ese verbo, los expertos consideran ahora que «detrás de esa palabra puede estar una divinidad vascónica relacionada con la fortuna». Por lo tanto, y como ha explicado posteriormente Gorrotxategi, «se trataría de una ofrenda, de dar algo a una divinidad».
En cualquier caso, Aiestaran recuerda que seguimos estando en el campo de las hipótesis y que «todos los investigadores señalan que hace falta más arqueología, que se excave más, que se encuentre más restos de este tipo para que se pueda ampliar este corpus y arrojar más luz sobre todas estas líneas que son difíciles de interpretar».
«Es una pieza que guarda un gran misterio, que genera mucha inquietud y ganas de conocer qué hay debajo de eso. Y esperemos que en los años que vengan encontremos más restos de este tipo gracias al apoyo del Ayuntamiento del Valle de Aranguren, al trabajo de la Sociedad de Ciencias Aranzadi y el apoyo del Gobierno de Navarra».
Instalacion del ‘hombre de Loizu’
Además de la Mano de Irulegi, el Museo de Nafarroa alberga desde este martes otro hallazgo arqueológico de importancia realizado en los últimos años. Se trata del ‘hombre de Loizu’, el esqueleto de un cazador de hace 11.000 años que fue localizado en una cueva de Erro. Además, en la misma sala de Prehistoria se ha ubicado el denominado mapa de Abaunz en un nuevo lugar más visible, a la entrada de la sala.
La presentación de todas estas novedades se ha realizado en un acto oficial al que han acudido la lehendakari de Nafarroa, María Chivite; la consejera de Cultura, Deporte y Turismo del Ejecutivo navarro, Rebeca Esnaola, además de la directora del Museo de Nafarroa, Mercedes Jover. También han asistido el comisariado científico de ambas piezas, Mattin Aiestaran, Javier Velaza y Joaquín Gorrotxategi, en el caso de la Mano de Irulegi, y Jesús García y Maitane Tirapu, en el del ‘hombre de Loizu’.
Otros expertos vinculados con estos hallazgos han tenido que seguir el acto desde otra sala, en la que se les ha ofrecido el evento en streaming.
En su intervención, Chivite ha destacado la relevancia de estas piezas y ha animado a la ciudadanía a conocerlas y aprender de ellas, «porque entender el pasado nos ayuda a comprender nuestro presente y nos proyecta al futuro».
En nombre del equipo que ha intervenido en la Mano de Irulegi, el epigrafista Javier Velaza ha destacado que la investigación de la emblemática pieza ha sido «un proceso guiado por la colaboración, el rigor y la transparencia», y ha considerado «muy importante transmitir a la sociedad lo que sabemos y no sobre un documento tan extraordinario como polémico».
Y por el comisariado del ‘hombre de Loizu’, García ha destacado que en el estudio de esos restos «ha participado más de medio centenar de personas» y ha puesto de relieve los vínculos que nos relacionan con ese cazador de hace 11.000 años. Por un lado, «su muerte en un episodio de violencia interpersonal, pero también representa a un grupo humano que desarrolló un ritual para su enterramiento».
Por su parte, la directora del Museo de Nafarroa, Mercedes Jover, ha indicado que con la presentación estos hallazgos, el día de hoy se ha convertido «en uno de esos días que marcan de manera especial a las instituciones». Ha añadido que se trata de «un legado del que debemos disfrutar» y que su exposición pública se ha llevado a cabo «en cuanto ha sido posible»
Así que a partir de este martes, la Mano de Irulegi y el ‘hombre de Loizu’ ya se pueden contemplar en la nueva instalación de la sala de Prehistoria, ubicada en la planta -1 del Museo de Nafarroa y a la que se accede tanto por escalera como por un ascensor.
Estará abierta al público, con entrada gratuita, en el horario habitual de apertura del museo: de 9.30 a 14.00 horas y de 17.00 a 19.00 horas de martes a sábado, y de 11.00 a 14.00h los domingos y festivos. Durante el período navideño, también abrirá los lunes, pero cerrará 25 de diciembre y 1 de enero.
El museo ofrecerá al público durante este horario un servicio presencial de mediación en castellano y euskara para facilitar la comprensión de las piezas en exposición. A comienzos de 2025, se programará un ciclo de conferencias en torno a las piezas ahora exhibidas.