NAIZ
DAMASCO

Al-Golani disuelve grupos armados y suspende la Constitución en Siria

Al-Sharaa se dirige a los líderes de las múltiples facciones que participaron en la reunión.
Al-Sharaa se dirige a los líderes de las múltiples facciones que participaron en la reunión. (SANA | AFP)

El líder de facto de Siria, Ahmed Husein al-Sharaa, conocido como Abu Mohamed al-Golani, tomó formalmente el cargo de presidente del país, poco más de un mes después de que la coalición islamo-yihadista bajo su liderazgo ocupara la capital y acabara con el régimen de Bashar al-Assad, huido a Rusia.

Al-Sharaa fue designado «presidente del país en la fase de transición y ejerce las funciones de la Presidencia de la República Árabe Siria y la representa en foros internacionales», anunció el portavoz del Departamento de Operaciones Militares, el coronel Hasan Abdelgani, tras una reunión con numerosos líderes de las principales facciones militares, grupos proturcos del ELS, yihadistas o facciones salafistas que compiten con la fuerza principal, HTS.

Precisamente, entre las decisiones de la nueva Administración se anunció «la disolución de las facciones militares y los cuerpos revolucionarios políticos y civiles, y su integración en las instituciones del Estado» bajo un mando común. De acuerdo con el texto, esta disolución afecta también al Organismo de Liberación del Levante (Hayat Tahrir al-Sham, HTS), facción dirigida por Al-Sharaa, y que impuso su liderazgo, no pocas veces con choques armados, en el reducto de la provincia de Idleb.

Aun sin las siglas, son los hombres de HTS los que gobiernan el país y dominan el Ejército, y aún tienen que lidiar con múltiples facciones del proturco Ejército Libre Sirio que combate a los kurdos, la Cámara de Operaciones del Sur, las fuerzas drusas o las kurdo-árabes FDS, que controlan amplias regiones autónomas en el este del país.

Antes de este anuncio, el grupo yihadista Hurras al-Din, afiliado a Al Qaeda, anunció su disolución, aunque advirtió a los suníes de la región de «que bajen las armas y se preparen» para la «siguiente fase», y prometió que seguirán siendo «soldados» en caso de que haya que «responder ante cualquier llamada de apoyo en cualquier parte de tierras musulmanes».

Hurras al-Din surgió en 2018 de una escisión de HTS.

DISOLUCIÓN DEL EJÉRCITO

Abdelgani anunció también la disolución del Ejército y de todos los cuerpos de seguridad vinculados a él para formar «nuevas instituciones de seguridad». Señaló que se someterá a una «reconstrucción» según «bases nacionales».

Hace una semana, el ministro de Defensa, Marhaf Abu Qasra, anunció la intención de integrar en su seno hasta 70 facciones que participaron en el derrocamiento de Al-Assad.

También ha quedado abolida la Constitución de 2012, y el nuevo poder ha disuelto igualmente el Parlamento sirio y ha suspendido «todas las leyes excepcionales», además de la «Asamblea Popular formada durante la época del régimen extinto y de los comités que emanaron de ella».

El nuevo presidente formará un «Consejo Legislativo interino para la fase selectiva». Según el portavoz, Al-Sharaa «asumirá sus funciones hasta que se adopte una Constitución permanente para el país».

Al-Sharaa había dado un plazo no inferior a cuatro años antes de convocar unas elecciones.

DISOLUCIÓN DEL PARTIDO BAAZ

Por otra parte, las nuevas autoridades sirias anunciaron la disolución del Baaz, el partido de Bashar al-Assad, formación que el pasado diciembre había anunciado el cese de sus actividades «hasta nuevo aviso», y dejó todas sus propiedades y fondos bajo la supervisión de los ministerios sirios de Finanzas y de Justicia.

«Anunciamos la disolución del Partido Árabe Socialista Baaz, así como los partidos del Frente Nacional Progresista y todos los organismos y comités a los que pertenecen, y se prohíbe que se vuelvan a formar bajo cualquier otro nombre», informó el portavoz.



Damasco lidia con los factores ruso e israelí

Enemigos en el campo de batalla hace menos de dos meses, Rusia y el nuevo régimen sirio empiezan a tejer una nueva relación. Tras la reunión del hombre fuerte de Siria, Ahmed al-Sharaa, con el viceministro de Exteriores ruso, Mijail Bogdanov, la nueva Administración siria aseguró que «el restablecimiento de las relaciones debe abordar los errores del pasado, respetar la voluntad del pueblo sirio y servir a sus intereses». A su vez, el Kremlin indicó que quiere «construir y mantener un diálogo permanente con las autoridades sirias», y dijo apoyar «los cambios positivos que se están dando en Siria». Sobre la mesa se encuentra el futuro de las bases militares rusas en el país árabe, cruciales para la política exterior de Rusia en Oriente Medio y el norte de África.

Por otra parte, el nuevo régimen sirio se enfrenta a la ocupación de Israel, aumentada tras la caída de Al-Assad. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó que las fuerzas israelíes seguirán apostadas en el lado sirio del monte Hermón, en los Altos del Golán, de manera indefinida, lo que viola el acuerdo territorial de 1974 entre Israel y Siria. Los habitantes del lado sirio reclaman su retirada y piden a la comunidad internacional detener el avance israelí. GARA