NAIZ

La UCI prohíbe la «inhalación repetida» de monóxido de carbono a partir del 10 de febrero

La UCI ha prohibido, a partir del próximo 10 de febrero, la «inhalación repetida» de monóxido de carbono en el pelotón y solo autorizará su uso «en el seno de una estructura médica y bajo la responsabilidad de un profesional de salud». Esta prohibición es independiente al Código Mundial Antidopaje.

Pogacar, durante la última edición del Tour.
Pogacar, durante la última edición del Tour. (Anne-Crhistine POUJOULAT | AFP)

Tal y como estaba previsto, la Unión Ciclista Internacional (UCI) ha acordado este sábado prohibir la inhalación repetida de monóxido de carbono en el pelotón a partir del 10 de febrero con el fin, según la federación internacional, de «proteger la salud de los corredores».

Reunido el viernes y el sábado en la ciudad francesa de Arras, con motivo del Mundial de ciclocross, el comité director de la UCI «ha aprobado la prohibición de la inhalación repetida de monóxido de carbono», ha anunciado, precisando que la medida «entrará en vigor el 10 de febrero de 2025».

La polémica sobre el uso del monóxido de carbono nació durante el último Tour, cuando la web especializada ‘Escape Collective’ reveló que al menos tres equipos, entre ellos el UAE de Tadej Pogacar y el Visma de Jonas Vingegaard (el tercero era el Israel PT) habían recurrido a este gas, inodoro e incoloro, responsable de muchos accidentes domésticos.

Interrogados por la prensa durante el Tour, tanto Pogacar como Vingegaard (primero y segundo en la clasificación final) admitieron su uso, pero quitaron hierro al asunto.

«No hay nada sospechoso», declaró el campeón esloveno, insistiendo que el procedimiento solo sirve para medir los beneficios en el organismo de los entrenamientos en altitud.

La UCI ha declarado este sábado que el monóxido de carbono «se utiliza habitualmente en la medicina deportiva para medir la masa total de hemoglobina y el volumen sanguíneo, especialmente para examinar los efectos del entrenamiento de resistencia y de la exposición a altitud en la capacidad del transporte de oxígeno».

«No obstante, su inhalación repetida puede provocar problemas de salud agudos y crónicos, como dolor de cabeza, una letargia, náuseas, vértigos y confusión. Estos síntomas pueden agravarse en cualquier momento y evolucionar en problemas del ritmo cardíaco, crisis de epilepsia, parálisis y pérdidas de conocimiento», ha advertido la organización.

La inhalación de CO2 se autorizará «en el seno de una estructura médica y bajo la responsabilidad de un profesional de salud experimentado» y deberá constar en el dosier médico de cada corredor.

Esta prohibición es independiente al Código Mundial Antidopaje, ya que por el momento la Agencia Mundial Antidopaje no considera ilegal el uso de este gas.