Dabid Lazkanoiturburu
Nazioartean espezializatutako erredaktorea / Redactor especializado en internacional

Trump recibirá a Macron y Starmer y llama «dictador» a Zelensky

La Casa Blanca anunció que su inquilino recibirá a los líderes francés y británico, dispuestos a enviar tropas a Ucrania. El anuncio sigue a la segunda reunión en París de líderes europeos y de la OTAN, incluidos Suecia, Finlandia y Canadá. Trump acusa a Ucrania de su invasión.

Emmanuel Macron recibe al presidente interino de Rumanía, Ilie Bolojan, en el Elíseo.
Emmanuel Macron recibe al presidente interino de Rumanía, Ilie Bolojan, en el Elíseo. (Ludovic MARIN | AFP)

El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz, anunció que el presidente francés, Emmanuel Macron, viajará a Washington la próxima semana, y será recibido por el presidente, Donald Trump, quien se entrevistará, asimismo, con el primer ministro británico, Keir Starmer, con la negociación sobre el fin de la guerra en Ucrania como telón de fondo.

Ayer tuvo lugar en París la segunda reunión informal organizada por Macron para abordar el futuro de la guerra de Ucrania, con la participación en persona de los presidentes de Rumanía y de Luxemburgo y líderes de otros 18 países, incluido Canadá, presentes por videoconferencia.

Participaron, sobre todo, representantes de países europeos que no estuvieron el pasado lunes en París en la primera reunión organizada por Macron, cuyo formato reducido causó cierto malestar entre los ausentes, verbalizado por la República Checa.

A la cita presencial del lunes fueron invitadas las principales potencias del continente -los Estados español y francés, Alemania, Dinamarca, Países Bajos, Italia, Gran Bretaña y Polonia-, además de los líderes de la OTAN y de las instituciones de la UE.

En la de ayer, sobre todo por videoconferencia, la lista de invitados incluyó, entre otros, al primer ministro belga, Bart De Wever, y al de Portugal, Luís Montenegro.

También participaron los jefes de Gobierno de dos países europeos miembros de la OTAN, pero no de la UE: el de Noruega, Jonas Gahr Store, y la de Islandia, Kristrún Frostadóttir. Sin olvidar a Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá, que sin ser un país europeo es miembro de la OTAN.

Macron insistió tras la reunión en que «Ucrania debe estar siempre asociada y sus derechos respetados» y en que «las preocupaciones de los europeos sobre la seguridad deberán ser tenidas en cuenta».

LOS AUSENTES Y LOS NUEVOS ALIADOS

Entre las ausencias destacaron la de la Hungría del ultra Viktor Orban, afín a Moscú, y la de Eslovaquia. Por contra, Suecia y Finlandia, nuevos aliados de la OTAN tras la agresión rusa a Ucrania, se muestran firmes contra la entente Trump-Putin.

El presidente finlandés, Alexander Stubb, afirmó que «es el momento de actuar» y que Europa necesita mantener «la cabeza fría» para ofrecer el máximo apoyo a Ucrania, y ejercer la máxima presión sobre Rusia. El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, coincidió en que «Europa y el mundo se encuentran ahora mismo en una encrucijada. Cómo termine la guerra en Ucrania va a influir en la definición de la seguridad en Europa para las generaciones venideras».

En una entrevista para los principales medios regionales franceses, Macron matizó que «Francia no se está preparando para enviar tropas sobre el terreno, beligerantes en un conflicto, al frente».

En su lugar, señaló como alternativa «enviar expertos o incluso tropas en plazos limitados, fuera de cualquier zona de conflicto, para consolar a los ucranianos y mostrarles solidaridad (...) Esto es lo que estamos pensando con los británicos», señaló.

PUTIN «NO EXCLUYE» A UCRANIA

El presidente ruso, Vladimir Putin, no comprende la «histeria» de Ucrania por su ausencia un día antes de las conversaciones entre Washington y Moscú en Riad, capital saudí, pues «nadie» busca excluir a Kiev. Putin afirmó que Trump le transmitió que «EEUU parte de la base de que el proceso de negociación se llevará a cabo con la participación de Rusia y Ucrania».

«Nadie excluye a Ucrania de este proceso. Por tanto, no hay razón para reaccionar así por la reunión de Rusia y Estados Unidos», señaló en su visita a una fábrica de drones en San Petersburgo.

El inquilino del Kremllin se felicitó de que Trump, desde que empezó a conocer más de cerca la situación sobre el terreno, habría dejado de lado su idea de que puede poner fin a la guerra a la mayor brevedad posible. «Reconoció que se necesitarían seis meses», añadió.

Putin responsabilizó a los líderes europeos de la enturbiada relación con la nueva Administración de EEUU y alabó la «moderación» de Trump hacia ellos a pesar del comportamiento «grosero» que tuvieron, en especial durante la campaña estadounidense.



Trump arremete contra el «dictador» Zelenski

Volodimir Zelenski tachó de «desinformación» rusa las críticas contra él de Donald Trump, que replicó tildándole de «dictador».

Horas antes, desde su residencia de Mar-a-Lago, el magnate se mostró «muy decepcionado» con el presidente ucraniano por sus críticas a unas conversaciones «sobre Ucrania sin Ucrania». «Hoy escuché ‘oh, no fuimos invitados’. Bueno, has estado allí durante tres años. Deberías haberlo terminado hace tres años. Nunca deberías haberlo comenzado», dijo, acusando a Kiev de desencadenar su propia invasión.

Fiel a su táctica de acusar sin pruebas, Trump aseguró que Ucrania habría desviado parte de la ayuda estadounidense. «El presidente Zelenski me dijo la semana pasada que no sabía dónde estaba la mitad del dinero que les dimos», sostuvo, antes de criticar la ausencia de elecciones en Ucrania en plena agresión rusa.

«No hemos tenido elecciones en Ucrania, en la que tenemos la ley marcial y en la que el líder de Ucrania tiene un 4% de apoyo», manifestó Trump.

Zelenski aludió a una encuesta publicada ayer por el Instituto Internacional de Sociología de Kiev, según la cual un 57 % de los ucranianos confía en el presidente. El anterior sondeo de ese mismo instituto fue realizado en diciembre y situaba el índice de apoyo a Zelenski en el 52 %. Otras encuestas le dan un 40%. La mitad, sí, del 80% que le otorgaban cuando fue elegido en 2019, pero diez veces mas que el 4%.

El presidente ucraniano confirmó que la oferta de acuerdo económico entregada por la Casa Blanca a Kiev hace una semana plantea que Ucrania ceda el 50% de sus recursos naturales a EEUU y desmintió las cifras sobre el monto del apoyo a Ucrania mencionadas por Trump, que cifró en 500.000 millones de dólares la cantidad que Washington debe obtener de los recursos minerales ucranianos para cobrarse la factura de la asistencia suministrada hasta ahora.

Según Zelenski, Kiev ha recibido de EEUU 67.000 millones en armamento y 31.500 en ayuda financiera. Los análisis la cifran en unos 180.000 millones.

Trump replicó que la Administración demócrata de EEUU gastó 350.000 millones de dólares en asistencia a Ucrania y acusó a Zelenski de «ser un cómico de éxito modesto que quiere seguir teniendo acceso a dinero fácil».

La ONU recordó que Zelenski ejerce como tal tras unas elecciones «debidamente celebradas» y el canciller alemán, Olaf Scholz, tildó de «falsas y peligrosas» las diatribas de Trump. D. L.



El reexpansionismo de EEUU resucita a los liberales canadienses

Las amenazas de anexión del presidente estadounidense, Donald Trump, están permitiendo al gobernante Partido Liberal de Canadá de Justin Trudeau recuperarse en las encuestas, que hasta hace solo un mes situaban al opositor Partido Conservador con 20 puntos de ventaja y llegaron a tener hasta 27 puntos.

En un sondeo dado a conocer el martes por la empresa Nanos, los conservadores tienen una intención de voto del 39%, los liberales se sitúan en segundo lugar con el 32% y el socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD) obtendría un 15%.

Las malas perspectivas electorales obligaron a un cada vez más impopular Trudeau a anunciar a mediados de diciembre que dimitirá tan pronto como el Partido Liberal elija a un sustituto, lo que se producirá el 9 de marzo.

Las formaciones de la oposición, que controlan la Cámara Baja del Parlamento, han indicado que en cuanto se reanuden las sesiones parlamentarias el 28 de marzo presentarán una moción de censura para provocar la convocatoria de elecciones anticipadas.

Pero la irrupción de Trump en la política canadiense y la propia sustitución de Trudeau al frente del Partido Liberal (el exgobernador del Banco de Canadá, Mark Carney, es el principal favorito) podrían obligar a la oposición a dar marcha atrás.