
En la rueda de prensa de la mañana el entrenador del Athletic, Ernesto Valverde, no ha querido descartar la disponibilidad de Oihan Sancet para el partido de este jueves a las 18.45 ante la Roma en San Mamés, el de vuelta de octavos de final de la Europa League. No obstante, el de Viandar de la Vera había admitido que ve «muy difícil que esté» en condiciones de jugar, ni aunque sea saliendo del banquillo. Y los hechos son claros: por la tarde el atacante navarro ha continuado sin incorporarse al trabajo de grupo en Lezama y el trécnico no lo ha incorporado en la convocatoria, donde sí están Álvaro Djaló y los cachorros Aimar Duñabeitia y Aingeru Olabarrieta.
Sobre el equipo que pondrá sobre el terreno de juego, en la rueda de prensa previa al encuentro, Valverde ha subrayado su confianza en Unai Núñez, un jugador con pocos minutos en lo que va de temporada y que tiene que jugar junto a Aitor Paredes por las bajas de los centrales titulares Dani Vivian por lesión y Yeray Álvarez por sanción.
«Unai Núñez es un central de garantías que cuando ha jugado lo ha hecho bien», ha insistido avanzando que, saque el equipo que saque, «la intención es ir a ganar desde el principio, aunque sin pasarnos de frenada».
Por ello ha considerado que deben salir a remontar el 2-1 adverso, pero sin perder nunca «el control de la situación». «Tenemos que tener la cabeza fría porque no podemos conceder, tenemos que meter un gol para ganar y dos para pasar», ha apuntado, consciente de la dificultad de superar a un «gran equipo, con un gran entrenador» como es la Roma que dirige Claudio Ranieri.
«Espero una Roma parecida a la que jugó allí. Ellos pueden manejar muchos registros, pero que ellos tengan que defender más depende de nuestro juego. Su juego de ataque es muy bueno, pero nosotros estuvimos bien y mañana –el del jueves– es otro partido», ha indicado, en referencia en el poderío del rival y en el plan de partido.
Al respecto, Valverde tiene claro que el Athletic tiene que encarar el choque centrándose en sí mismo y en dar su mejor versión, como cree que hizo en la ida «a pesar del 2-1 en el último minuto» que dio ventaja al rival para la vuelta.
«Hay que ganar el partido, no nos vale otro resultado. Tenemos que tener en cuenta el nivel de sus jugadores, de sus delanteros, que te pueden hacer un gol y resolver en cualquier momento, pero tenemos que ir a por la victoria poniendo en el campo los que somos», ha avanzado.
En cuanto al desarrollo de la eliminatoria, Valverde no le dio demasiada trascendencia al 2-1 logrado por la ‘Loba’ en la última jugada del partido de ida. «A veces pasa, pero ni pensamos mucho cuando lo hacemos nosotros ni cuando nos lo hacen», ha asegurado.
«La Roma es un gran equipo, con un gran entrenador, pero con un gran ambiente en su campo le hicimos frente en la ida y a ver si tenemos el acierto que perseguimos. Cuando todo es muy táctico, a veces nos interesa romper el juego, pero siempre hay que tener un poco de control, los equipos buenos de cinco ocasiones no te meten dos, te meten tres», ha resumido su visión previa al choque.
Por otro lado, Valverde espera «un gran ambiente en San Mamés», a pesar del conflicto entre la directiva del Athletic e Iñigo Cabacas Herri Harmaila. «Es un partido decisivo y definitivo. Espero un gran ambiente y que nosotros nos conectemos para que la afición nos ayude todavía más», ha apuntado, después del último cruce de mensajes con el que unos y otros están intentando relajar la tensión.
De Marcos: «Que no sea mi último partido en Europa»
Por su parte, el capitán del Athletic, Óscar de Marcos, afronta con total serenidad el decisivo encuentro frente a la Roma. El veterano jugador de alavés tiene las ideas muy claras al respecto, con el deseo de que no sea el de este jueves su último partido en competición europea.
«Llevo años que hasta final de temporada no he sabido si iba a seguir o no y he vivido como si fuese el ultimo todos los encuentros de la Copa. Ojalá este no lo sea en Europa, pero voy a vivirlo como si lo fuera», ha indicado.
Por ello, por la misma naturalidad que caracteriza al futbolista alavés, mantener la identidad propia ha sido una de las claves que De Marcos ha esgrimido. «El Athletic está ocupado en ser el Athletic desde el respeto al rival. Si alguien nos tiene que ganar, que nos gane porque sean mejores; pero no porque nosotros no hemos sido nosotros mismos. Pensando de esta manera nos ha ido bien hasta ahora», ha afirmado.
Así las cosas, el lateral de Guardia solo piensa en ganar para, al menos, forzar el tiempo extra. «Hay que pensar en positivo. El resultado de la ida es favorable para la Roma, por lo que tenemos que ganar en casa. Hay bajas, pero tenemos otros jugadores de garantías disponibles», ha remachado.
Respecto al ambiente que espera en San Mamés, el jugador rojiblanco es consciente de que «se nota que esta es una semana diferente. Hay mucha ilusión depositada en esta competición. Es bonito porque este buen ambiente siempre ayuda. Que se vayan solucionando las diferencias y haya acercamientos es muy importante para nosotros. Si San Mamés es una caldera, tendría que serlo hasta final de temporada, por el bien de todos», ha dicho.

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