«Las dificultades alarmantes de Inspección de Trabajo para meter mano a los desmanes de algunas empresas» ha sido denunciada por el sindicato LAB en Iruñea, donde este jueves se ha celebrado una asamblea de delegados de la sección de Servicios Privados de la central.

El encuentro ha tenido lugar en el palacio del Condestable, desde donde ha partido una manifestación que ha atravesado parte de Alde Zaharra de Iruñea para terminar ante la sede de Inspección de Trabajo en el paseo Sarasate.

La marcha la abría una pancarta en la que se podía leer ‘Ante la pasividad de Inspección de Trabajo. Borroka sindikala’ y durante la misma se han coreado consignas como «Más inspecciones, más sanciones», «Menos explotación, más prevención», «No más muertes en el trabajo» y «Ez, ez, ez, lan istripurik ez». Durante la concentración, se han encendido varias bengalas que han diseminado por la zona un humo de color rojo.

Mientras se desarrollaba la concentración, Arkaitz Zudaire, miembro de Servicios Privados de LAB, ha explicado a los medios que, tras las celebradas en Iruñea y Azkoien, la asamblea este jueves en el Condestable corresponde a la tercera jornada en la que esta sección de la central «denuncia la precariedad laboral y las muertes en el trabajo, y la imposibilidad de Inspección de Trabajo para meter mano a los desmanes de muchas empresas».

Zudaire ha recordado que «llevamos once muertos en accidente laboral en lo que va de año en Navarra» y que es necesario ponerlo en evidencia para, al mismo tiempo, «sacar el foco de lo que tratan de hacer las empresas, que es poner el absentismo laboral en el debate político».

Ha calificado esa actitud de la patronal de «echar balones fuera, de no hacerse responsables de las medidas de salud que deberían mantener muchas de las empresas y de la precariedad, por ejemplo, en el transporte de mercancías. Vamos a peor en accidentes laborales y aumentan las muertes», como el siniestro ocurrido en Fitero, con cuatro transportistas muertos «a causa de las largas jornadas laborales y sin descansar como se debe».

Sobrecarga y pasividad

Para atajar esas prácticas estaría Inspección de Trabajo, pero «ahora mismo debe de haber unos 10 trabajadores para toda Navarra». De ese total, «tres pueden estar de baja y siete para todo el territorio es totalmente suficiente», y se está traduciendo en «una sobrecarga de trabajo, que no alcancen a cubrir todas las solicitudes y peticiones que hay».

Además, ha denunciado que «se da una pasividad por parte de Inspección de Trabajo» en relación con los requerimientos a las empresas. En este sentido, ha explicado que «muchas de las inspecciones tendrían que sancionar en el momento, pero se le da a la empresa entre dos y tres meses para que pueda tomar algún tipo de iniciativa, no con una sanción, sino para pasar más adelante y comprobar que se han hecho las modificaciones pedidas».

Zudaire ha recordado que «muchas veces se dan los accidentes porque las instalaciones no están en condiciones y habría que sancionar en el momento y no esperar a ver si lo han solucionado en dos o tres meses».