Iñaki  Iriondo
Cronista político

Mucha tarea por delante

La nueva ejecutiva del PNV.
La nueva ejecutiva del PNV. (Andoni CANELLADA | FOKU)

Los y las integrantes del nuevo EBB y del anterior celebrarán hoy una comida que se anuncia como «tradicional» tras las asambleas generales. Lo cierto es que el PNV ha terminado enfrentando una decisión muy arriesgada: ha acabado cambiando a la vez toda su dirección nacional, cuando también viene de un relevo institucional en el Gobierno de Lakua y en el Parlamento de Gasteiz. Probablemente tenía más sentido la idea original de Andoni Ortuzar de quedarse como ancla de lo hecho hasta ahora, pero las indecisiones y lo inesperado los carga el diablo.

El nuevo presidente del EBB enunció ayer varias «tareas inmediatas» para la dirección entrante. Y como colofón incluyó una última de difícil satisfacción. Aitor Esteban afirmó que «además de todo eso, hay algo que quiero mencionar expresamente, porque personalmente lo tengo muy claro, veo qué es lo que tenemos dentro y cuál es nuestro potencial: vamos a impulsar un mayor papel de la mujer en el partido, comenzando desde el primer día. Emakume abertzaleak, nire hitza duzue, hauxe neuretzat lehentasun nagusia izango da».

Pero lo cierto es que en este EBB habrá 14 personas y de ellas tan solo 4 son mujeres. Y esa ha sido una decisión tomada por los equipos negociadores de la plancha oficial, que parecen tener muy claro quién es vizcaino, alavés, navarro o guipuzcoano, pero quieren saber poco de paridad. Esa es una tara que, salvo que medien dimisiones, no se podrá corregir en los próximos cuatro años.

En este sentido, cabe recordar que en materia de paridad e igualdad entre hombres y mujeres en organizaciones que reciben subvenciones públicas, hay normativa legal, autonómica y estatal que, si se cumplieran con la rectitud exigible por parte de las autoridades competentes, incluso podría sacar los colores al nuevo EBB.