
El Athletic solo se ha quedado sin marcar en ocho de los 43 partidos oficiales que ha disputado ya esta temporada pero seis han sido desde enero y dos en las dos últimas jornadas, que ha saldado con los empates contra Osasuna y Villarreal. En la Cerámica ha vuelto a faltar el gol y también las ocasiones, al menos hasta la recta final, cuando los locales se han quedado con diez.
El equipo, al menos, mantiene los seis puntos de distancia y el golaverage con el conjunto groguet –que debe recuperar su choque frente al Espanyol– y también sigue seis por encima del Betis, que además se enfrenta, precisamente, al Villarreal la próxima semana. El consuelo se reduce por la factura que ha dejado el choque porque, con Yeray fuera de la convocatoria por una sobrecarga, Yuri se ha retirado lesionado en la primera parte y Paredes en la segunda, a cuatro días de la visita a Glasgow y en el arranque de un maratón de partidos extenuante.
Las sensaciones que ha dejado el partido tampoco han sido las mejores porque el Athletic ha sufrido muchísimo ante un rival que ha dominado casi todo el partido y ha monopolizado las ocasiones. El Villarreal, que también llegaba más obligado que los rojiblancos, ha entrado mejor al partido, encerrando a un rival que ni ataba ni robaba el balón, con lo que se ha visto sometido a un bombardeo. Parejo y Comesaña mandaban en el centro del campo, Yuri y Gorosabel las pasaban canutas con Buchanan y Álex Baena y, por suerte, ni Ayoze ni Barry han estado especialmente inspirados y Unai Simón ha resuelto con seguridad los problemas que le han ido surgiendo.
Los vizcainos han necesitado casi un cuarto de hora para pisar por primera vez el área rival, con un par de ocasiones que ha rematado Guruzeta pero no han vuelto a aparecer por allí hasta el final del primer tiempo, cuando una buena recuperación del guipuzcoano ha acabado con un centro de Nico Williams que su hermano no ha podido rematar en boca de gol. Para entonces, Yuri ya se había marchado con una lesión en el gemelo y el Villarreal ya había perdonado varias ocasiones, un par de ellas clarísimas.
No ha ido mejor el segundo tiempo, que ha empezado con Foyth perdonando en un saque de esquina. Yeremy ha sustituido al lesionado Buchanan y también ha hecho daño, como Gerard Moreno, que se ha incorporado a la vez. Pero también Berenguer, que le ha dado otro aire al ataque rojibanco –en menor medida Sancet, que ha reaparecido tras mes y medio de ausencia– aunque las ocasiones se seguían resistiendo.
Todavía eran cosa del Villarreal que ha vuelto a llevarse las manos a la cabeza con un contragolpe que Barry ha fallado prácticamente a puerta vacía. Se le acumulaban los problemas, que en el 71 ha visto cómo Paredes también se lesionaba al lanzarse al suelo para despejar un centro de Gerard Moreno. Y en el 75 ha encajado el gol de Barry. Por suerte, existe el VAR y el árbitro ha acabado anulando la acción por mano del delantero.
Las cámaras han echado otra mano al Athletic siete minutos después, cuando han permitido a Melero López comprobar la dureza de la entrada de Gueye sobre Sannadi, que ha acabado costándole la roja al central groguet. En superioridad, el Athletic ha generado peligro como no lo había hecho hasta entonces pero, como le había pasado a su rival en los ochenta minutos previos, le ha faltado acierto para culminar.
Villarreal: Luiz Junior; Kiko Femenía, Foyth, Costa (Kambwala, min.78), Sergi Cardona (Pedraza, min.78); Buchanan (Yeremy, min.56), Santi Comesaña, Parejo (Gueye, min.63), Álex Baena; Ayoze (Gerard Moreno, min.56) y Barry.
Athletic: Unai Simón; Gorosabel, Vivian, Paredes (Unai Núñez, min.73), Yuri Berchiche (Adama, min.35); Jauregizar, Prados; Iñaki Williams, Unai Gómez (Berenguer, min.63), Nico Williams (Sancet, min.63); y Guruzeta (Sannadi, min.73).
Árbitro: Melero López (Andalucía). Amarilla a Gorosabel (21’). Roja directa a Gueye (83’).
Incidencias: Partido de la 30ª jornada de Primera disputado en La Cerámica ante 19.158 espectadores.

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