Al menos 184 personas murieron este martes por el desplome del techo de una discoteca de Santo Domingo, la capital de República Dominicana, según el último recuento. Y la cifra de heridos supera el centenar, según ha confirmado el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).

Las autoridades dominicanas han dado fin la noche de este miércoles a las esperanzas de encontrar personas con vida, aunque director general del COE, Juan Manuel Méndez, ha reiterado que las brigadas de rescate permanecerán en el lugar hasta que exista una sola persona buscando a un familiar desaparecido.

«Sería un aliciente para nosotros que pudiésemos encontrar a alguien con signos vitales bajo los escombros, pero desde ayer a las tres de la tarde no hemos rescatado a nadie con vida», ha lamentado.

Despedida a las víctimas

La tragedia se produjo mientras actuaba el merenguero Rubby Pérez, cuyo cuerpo fue recuperado hoy de los escombros.

El siniestro también causó la muerte de los exjugadores de Grandes Ligas Octavio Dotel y Tony Blanco, así como el diseñador Martín Polanco y la gobernadora de la provincia de Montecristi, Delsy Cruz, que fue enterrada este miércoles en una ceremonia a la que asistió en el presidente del país, Luis Abinader.

Asimismo, los restos de Pérez fueron expuestos en una funeraria de Santo Domingo, para recibir este jueves un funeral por parte del Ministerio de Cultura que se realizará en el Teatro Nacional Eduardo Brito, el mismo que vio al artista ser premiado por su trayectoria a finales del mes pasado.

Este miércoles también fueron velados los restos del exlanzador Dotel, que permaneció por 15 temporadas en las Grandes Ligas, donde lanzó para, entre otros equipos, los Mets de Nueva York, Astros de Houston, Reales de Kansas City, Rangers de Texas y Cardenales de San Luis.