
El buque de rescate Aita Mari, de la ONG Salvamento Marítimo Humanitario (SMH), ha rescatado este domingo a 125 personas en aguas del Mediterráneo Central. Entre ellas hay 19 menores, 16 de ellos no acompañados y dos con edades inferiores a 12 años. Además, hay dos mujeres embarazadas. Los migrantes auxiliados proceden de Eritrea, Etiopía, Pakistán, Sudan, Egipto, Togo, Nigeria, Guinea Konakry, Camerún, Beni, Ghana y Niger.
Según ha explicado SMH en un comunicado, tras desembarcar en Salerno a las 108 personas rescatadas cuatro días antes, el Aita Mari retomó su misión en el Mediterráneo Central, y esta madrugada la alerta de Alarm Phone ha movilizado al buque humanitario ante la crítica situación de una embarcación de goma con el fondo roto y 84 personas a bordo, en grave peligro al estar embarcando agua.
«Tras dos horas de infructuosos avisos a las autoridades, el Aita Mari localizó la embarcación de goma, cuya posición había sido sobrevolada previamente por un avión de Frontex. Durante la operación de rescate, una segunda embarcación de madera con 45 personas a bordo apareció en la zona. Mientras se transferían 41 personas de este segundo bote al Aita Mari, las cuatro restantes accionaron los motores y abandonaron el lugar», ha señalado SMH.
Las autoridades italianas han asignado el puerto de Catania para el desembarco, previsto para este lunes a primera hora de la tarde. Sin embargo, las condiciones meteorológicas actuales, con rachas de viento de 30 nudos y una previsión de olas de 1,5 a 2 metros, anticipan una travesía difícil para las personas a bordo, que «acumulan fatiga y estrés tras pasar la noche en una embarcación con riesgo inminente de hundimiento».
«Hostilidad y represión»
Por otro lado, SMH ha indicado que en la mañana del sábado anterior, mientras el Aita Mari buscaba otra embarcación de goma, una patrullera de la Guardia Costera Libia, identificada con el número 648, se aproximó a gran velocidad. «Miembros de la tripulación libia apuntaron con un arma automática hacia el Aita Mari al tiempo que gritaban ‘Go home!’», ha denunciado.
«Y pocos minutos después, la tripulación del Aita Mari presenció la intercepción de un bote de goma. Con gran probabilidad, las personas a bordo serán recluidas en centros de detención libios sin garantías de protección de sus derechos e integridad física, tal como denuncian sistemáticamente quienes han sobrevivido a dichos centros», ha añadido.
Asimismo, ha alertado de que «el asesinato de un migrante guineano el 9 de abril en Túnez durante una operación de la Guardia Nacional contra asentamientos de población subsahariana, y la reciente suspensión de actividades de diez ONG en Libia por parte de las autoridades, bajo acusaciones de alterar la demografía, evidencian una creciente hostilidad y represión hacia las personas migrantes y refugiadas en el norte de África».
«La intensificación de la represión contra las personas migrantes en Túnez y Libia y la violencia y hostilidad contra las ONGs tanto en los países como en los espacios fronterizos se encuentra directamente relacionada con la implementación de la agenda migratoria europea, que prioriza la externalización de fronteras y ejerce presión sobre estos países provocando una grave vulneración de los derechos humanos», ha manifestado.
De hecho, ha apuntado que «los testimonios de migrantes que han logrado sobrevivir a la interceptación por las guardias costeras libia y tunecina describen un ciclo de violencia y explotación en los centros de detención. Relatan meses de condiciones inhumanas, casos de venta como mano de obra esclava y la práctica sistemática de torturas, violaciones y malos tratos como método de extorsión económica a sus familias».
Denuncia del Pacto Migratorio Europeo
Por último, SMH ha denunciado que el Pacto Migratorio Europeo contradice el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, donde los estados se comprometieron a respetar los derechos humanos de los migrantes.
La ONG ha subrayado la importancia de implementar el pacto migratorio «con un enfoque en la protección de los derechos fundamentales y la solidaridad, en contraposición a la represión y la devolución». Ha abogado por «un diálogo continuo entre instituciones, estados y organizaciones civiles para construir un sistema migratorio más justo y humano».
Zornotza, la landa de los rojos

Aplausos e insultos a Jone Laspiur por criticar ‘La infiltrada’ y las infiltraciones policiales

«No hubo ataque exterior, el apagón es producto de la codicia de las grandes eléctricas»

LAB denuncia que Metro Bilbao ha contratado a la empresa israelí I-SEC Aviation Security
