NAIZ, un nuevo medio para un nuevo tiempo político y social
El Kursaal de Donostia ha sido testigo de los primeros pasos públicos de NAIZ, un nuevo medio de comunicación que pronto verá la luz de la mano de Euskal Komunikabideen Hedapenerako Elkartea (EKHE), empresa promotora de GARA.
En torno a trescientas personas -accionistas, trabajadores y colaboradores- han asistido al acto en el que, además de desvelar el nombre de este nuevo canal de comunicación, se han explicado las líneas generales de este novedoso proyecto que irá mucho más lejos que una mera renovación de la actual web gara.net.
Un medio nuevo que tendrá entre sus pilares la idea de vertebrar una comunidad abierta, cuyos participes podrán no solo informarse, sino también aportar y expresarse.
Los límites del papel son obvios, «pero es que además en este momento la gente no solo quiere leer o escuchar, quiere participar, ser escuchada», ha explicado Iñaki Soto (@gara_isoto), director de GARA. «No podemos tener grandes estructuras como tienen otros, pero tenemos un valor añadido, la gente que trabaja con nosotros, que colabora, que ofrece un punto de vista que no aparece en ningún otro sitio».
Obviamente, el más prosaico aspecto de la economía también ha tenido su espacio. «La información seguirá siendo gratis, pero necesitamos financiación para sostener un modelo profesional que garantice la calidad, y habrá servicios y productos de pago», ha desvelado Soto, quien ha explicado que la edición digital recibió el año pasado casi cinco millones de usuarios únicos y que es un referente también fuera de las fronteras de Euskal Herria.
«Eso no sería posible sin las personas que pagan por la edición en papel», un soporte que, según aseguró Soto, «seguirá en los kioscos mientras haya kioscos».
Estas pinceladas sobre qué será NAIZ han sido el colofón al análisis sobre la situación actual, no solo de los medios de comunicación, sino del contexto general.
El primero en tomar la palabra ha sido Gorka Altuna, consejero delegado de EHKE, quien ha subrayado el nuevo tiempo político y social abierto en Euskal Herria, que coincide con una importante crisis económica en general y de los medios de comunicación tradicionales en particular.
En este contexto, ha agradecido el esfuerzo de quienes hace más de una década facilitaron la puesta en marcha de GARA y de quienes día tras día colaboran con su supervivencia, que ha calificado de «milagro» y que ha atribuid en buena medida al «esfuerzo titánico» de la plantilla.