El cese de Jiménez rompe el Gobierno de Iruñea
La decisión de la presidenta de Nafarroa, Yolanda Barcina, de destituir a su vicepresidente, Roberto Jiménez, ha puesto el punto final al Gobierno de coalición UPN-PSN. Los consejeros del PSN, Elena Torres y Anai Astiz, han anunciado su dimisión al conocer la noticia del cese.
El detonante del cese de Jiménez, según informa la agencia Efe citando fuentes de ambas partes, ha sido para los regionalistas las declaraciones que ayer por la mañana hizo el vicepresidente del Ejecutivo de Iruñea, y que por la noche reiteró la dirección del PSN, sobre un «agujero» en las cuentas del herrialde superior a los 132 millones de euros reconocidos el pasado día 1, y para el PSN que este exigiera a Barcina por la tarde que informe «con claridad» a los navarros de las cifras reales del déficit.
Así, UPN interpreta que las manifestaciones de Jiménez sobre el «agujero» fueron un intento por parte del PSN de desviar la atención sobre una enmienda que a un proyecto de ley foral del propio Gobierno habían presentado el miércoles por su cuenta, sin consultar a UPN, actitud que para los regionalistas rompía de hecho el pacto de Gobierno suscrito entre ambos en 2011.
En este sentido las mismas fuentes han subrayado que el PSN presentó en solitario esa enmienda, que intentaba moderar un aumento de la jornada laboral para los empleados públicos, «presionado» por los sindicatos, cuando el pacto de Gobierno precisa que en materia de proyectos de ley ambos socios deberán actuar de común acuerdo.
Esta iniciativa derivó el miércoles en «una bronca monumental» en el seno del Ejecutivo, hasta el punto que la presidenta Barcina interpretó que el pacto estaba «roto».
Si bien la situación se recondujo horas después al retirar el PSN su enmienda y pactar una conjunta con UPN, ayer Roberto Jiménez, según UPN, habría intentado desviar la atención con unas declaraciones en las que advertía que el «agujero» de las cuentas públicas navarras no es de 132 millones de euros como ha sostenido la presidenta sino «bastante superior».
Y del mismo culpó al vicepresidente regionalista, Álvaro Miranda, como responsable de Economía y Hacienda ya que su partido se había «fiado» hasta ahora de los números que este presentaba.
Una postura que respaldó por la tarde la permanente del PSN y así lo hizo público en un comunicado del que Jiménez informó con antelación a Barcina en una reunión que mantuvieron mientras el Parlamento de Iruñea celebraba una sesión plenaria.
Este encuentro ha sido para el PSN el que ha llevado a Barcina a tomar su decisión, ya que en el mismo Jiménez le «exigió» que fuera «clara con los navarros» e hiciera pública la cifra «real» del déficit que tiene el herrialde.
Dimisión de consejeros
Así, a las 00.30 la presidenta ha comunicado telefónicamente a Jiménez que acababa de firmar su destitución y dado «orden a la Policía Foral de la puerta de Palacio» sobre cómo debía proceder, aunque confiaba en que los consejeros del PSN siguieran en el Gobierno.
La razón dada por Barcina ha sido que el vicepresidente primero ha tenido «un comportamiento desleal» pero sin embargo estaba dispuesta a que el PSN «nombrara a otra persona para este cargo» y estaba «satisfecha» con el trabajo desempeñado por los consejeros del PSN en Fomento y Política Social, por lo que espera «seguir contando» con ellos.
No ha sido así porque, de madrugada, Anai Astiz y Elena Torres, quienes ocupaban dichas carteras, le han comunicado que presentan su dimisión y el partido ha dado además instrucción a todos sus cargos en el Gobierno para que hoy «recojan sus cosas», una salida del PSN que se va a producir, lamentan, sin conocer «la verdad» de la situación económica de Nafarroa al no haber concluido una especie de auditoría interna que habían iniciado los distintos departamentos a petición suya.