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Procesados cinco técnicos por la muerte en 2013 de un joven en el Paseo Nuevo de Donostia

El director del departamento de Infraestructuras de Donostia, dos técnicos municipales y dos más de otras tantas empresas que trabajaron en las obras del Paseo Nuevo han sido procesados por la muerte de Mikel Arzak, alcanzado por una roca desprendida del monte Urgull en agosto de 2013.

Varias piedras cayeron sobre el Paseo Nuevo y una de ellas golpeó mortalmente a Mikel Arzak. (Juan Carlos RUIZ / ARGAZKI PRESS)

El Juzgado de Instrucción número 2 de la capital guipuzcoana ha adoptado esta decisión en el auto que convierte las diligencias practicadas hasta el momento en un procedimiento abreviado.

Este auto, que puede ser recurrido en reforma y en apelación, da traslado de las diligencias previas a la Fiscalía y a las distintas partes, para que soliciten la apertura de juicio oral, el sobreseimiento de la causa o, «excepcionalmente», la práctica de diligencias complementarias.

Tras este trámite, el Ministerio Público, la acusación particular, que ejerce la familia del fallecido, y las defensas de los cinco procesados deberán redactar sendos escritos con sus conclusiones provisionales.

El fallecimiento de Mikel Arzak, de 20 años, ocurrió el 7 de agosto de 2013, al ser golpeado por una roca que cayó del monte Urgull cuando se encontraba en el Paseo Nuevo, una muerte que el Juzgado de Instrucción considera ahora que eventualmente podría constituir un delito de homicidio imprudente.

«Un bloque de unos seis metros»

El auto recuerda que meses antes de este accidente, en noviembre de 2012, se había producido otro desprendimiento de piedras en el Paseo Nuevo, a la altura de la Sociedad Fotográfica, donde cayó «un bloque de piedra de unos seis metros».

Por esta razón, el Ayuntamiento pidió entonces un estudio a una empresa especializada que determinó que era de esperar que la caída de bloques continuara, situación ante la que el consistorio encargó «un proyecto de obra» para evitar nuevos desprendimientos.

La Memoria de este proyecto insistió en la pertinencia de la intervención porque el talud iba a experimentar «frecuentes desprendimientos» con «riesgo» para peatones y vehículos, mientras que el anexo de Geología y Geotecnia también alertó de la posibilidad de «caídas de bloques de gran tamaño por descalce».

Asimismo, el Estudio Básico de Seguridad y Salud anejo incidió en «la posibilidad de acordonar la zona de riesgo de posibles interferencias entre los materiales y la circulación ajena a la obra».

Tras el fallecimiento de Mikel Arzak, el Ayuntamiento encargó un nuevo estudio que concluyó que el desprendimiento que causó la muerte del joven se produjo «a causa de las fuertes lluvias» registradas, conclusión refrendada por tres informes periciales más que obran en la causa.

«Medidas de seguridad adicionales»

No obstante, el auto del Juzgado de Instrucción considera que «lo que interesa en este punto no es la causa del accidente», sino «por qué nadie previno medidas de seguridad adicionales para terceros, a sabiendas de que existía un antecedente muy importante a tener en cuenta. Intervinieron muchos técnicos en la materia y ninguno de ellos tuvo en cuenta esa contingencia».

«No se consideró conveniente, por parte de ninguno de los técnicos intervinientes, tomar medidas de seguridad especiales frente a terceros. No se recomendó por ninguno de ellos el cierre del Paseo Nuevo al público ni se acordó la utilización de algún elemento que preservase la seguridad de los viandantes ante posibles desprendimientos. No se hizo antes de dar inicio a la ejecución de la obra ni tampoco durante la realización de la misma», advierte el auto.

Por estos motivos, el Juzgado de Instrucción considera que eventualmente los hechos podrían ser constitutivos de un delito de homicidio imprudente, por el que imputa al director del departamento de Infraestructuras y Servicios Urbanos del Ayuntamiento; a los dos técnicos municipales a los que se encomendó la dirección facultativa de la obra; a la geóloga encargada de redactar el Plan de Seguridad y Salud, y al encargado de seguridad.

El auto acuerda también el sobreseimiento de las actuaciones respeto al gerente de una de las empresas, al entender que «no tuvo ninguna intervención en la redacción del plan de Seguridad y Salud».