Iberdrola dice que ha pedido tiempo al Gobierno español para decidir sobre Garoña
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha indicado, respecto al futuro de la central nuclear de Garoña, que su compañía ha pedido al Gobierno español tiempo para poder conocer cuál va a ser la política energética en el Estado antes de adoptar una decisión.
Sánchez Galán, durante una conferencia con analistas para presentar los resultados de Iberdrola en el primer trimestre, ha respondido, al ser preguntado por Garoña, que la compañía ha pedido más tiempo al Gobierno español antes de solicitar el permiso para que la central nuclear vuelva a operar, ya que estos se conceden para plazos prolongados de tiempo.
«Antes de tomar cualquier decisión nos gustaría que se definiese la política energética» para no tomar decisiones que afecten a su cuenta de resultados, ha dicho Sánchez Galán, quien ha añadido que el tiempo necesario para analizar la situación sería de unos doce meses, no de años.
El presidente de Iberdrola, que ha vuelto a recordar como ya hizo en la junta de accionistas celebrada en Bilbo el pasado 31 de marzo que el negocio nuclear de la compañía en el Estado arrastra elevadas pérdidas, ha señalado que quieren saber cómo dentro de la política energética del Gobierno español se prevé pagar el coste de la energía nuclear y si se puede generar algún beneficio con ella.
Actualmente, la filial Iberdrola Nuclear España soporta importantes pérdidas debido a que esta actividad está gravada con grandes impuestos, según ha recordado Sánchez Galán, que ha explicado que esto «ha modificado el plan de negocio original» que tenía Iberdrola en esta área de actividad.
Iberdrola es copropietaria con Endesa de Nuclenor, la sociedad titular de la central nuclear de Garoña, que lleva parada desde 2012 y a la que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) le ha dado un informe favorable para reanudar su actividad aunque condicionado a llevar a cabo mejoras de seguridad.
En la pasada junta de accionistas de Iberdrola, Sánchez Galán dijo que le ha pedido a Endesa que desista de pedir el permiso para que pueda volver a operar y que tiene que otorgar el Gobierno, que tiene de plazo hasta principios de agosto para tomar una decisión.
Además, Nuclenor celebra este miércoles una junta extraordinaria de accionistas en la que se analizará el futuro de la central.