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El Ayuntamiento de Iruñea aborda la situación de las familias que viven en una sola habitación

El Ayuntamiento de Iruñea se une al Día Internacional de las Familias, que se celebra hoy 15 de mayo, presentando el programa ‘Familias vecinas sin casa. Una habitación no es un hogar’ que incluye una una exposición itinerante en los Civivox y una mesa redonda.

Presentación del programa municipal «Familias vecinas sin casa. Una habitación no es un hogar’. (AYUNTAMIENTO DE IRUÑEA)

Todos los detalles de las actividades han sido ofrecidos en rueda de prensa por la concejala especial de Igualdad, Laura Berro, la representante de Apoyo Mutuo-Elkarri Laguntza y de la PAH-Plataforma de Personas Afectadas por la Hipoteca y desahucios de alquiler, Maria Equiza, y la técnica de Igualdad, Laura Laquidáin.

El objetivo de este programa, organizado por el el Área de Participación Ciudadana, Igualdad, y Empoderamiento Social junto con la Asociación Elkarri Laguntza-Apoyo Mutuo, es visibilizar la situación de exclusión residencial grave en que se encuentran numerosas familias, en su gran mayoría mujeres que constituyen hogares monomarentales. Estas familias se ven obligadas a vivir en habitaciones realquiladas de unos 10m2.

Fotografías de familias
La exposición ‘Una habitación no es un hogar’ es una muestra de fotografías de Iván Benítez protagonizadas por familias, en su mayoria hogares monomarentales, que ante la situación de exclusión social en que se encuentran se han visto obligadas a vivir en habitaciones realquiladas en un piso compartido con terceras personas. Esta exposición forma parte de una campaña de denuncia más amplia que la PAH-Plataforma de Personas Afectadas por la Hipoteca y desahucios de alquiler está realizando desde diciembre de 2016.

Las imágenes que se muestran recogen el testimonio de familias que viven en Iruñea y su entorno, gran parte de ellas compuestas por mujeres con menores a su cargo, que hacen reflexionar sobre la necesidad de actuaciones que posibiliten que el derecho a la vivienda sea un derecho real y efectivo para toda la población.

La exposición podrá verse en Civivox Condestable desde hoy hasta el viernes 19 de mayo de 9 a 14 y de 17 a 21 horas y en Civivox Sanduzelai del 29 de mayo al 3 de junio de 9 a 21 horas.

Mesa redonda
‘La precariedad de la vivienda y su impacto en las mujeres’ es el título de la mesa redonda que completa el programa y que se celebrará este miércoles, 17 de mayo, de 19 a 21 horas en Civivox Codestable, en la Sala 17  de la tercera planta. Participarán Luisa Jusué, trabajadora social del Centro de Salud de Donibane; Ruth Iturbide, investigadora y doctora en Ciencias Humanas y Sociales; y Philomena Ebere, mujer afectada por esta situación.

Luisa Jusué hablará sobre el impacto que tiene en la salud de las personas, concretamente en estas mujeres con menores a cargo, vivir en una habitación. Ruth Iturbide presentará la investigación ‘From street to Home’ realizada por la Universidad Pública de Nafarroa y de la que ha formado parte, que trata sobre la situación de las mujeres con altos niveles de exclusión, entre ellos la vivienda, y estrategias que se pueden llevar a cabo para su inclusión.

Esta investigación ha sido financiada por la UE y forma parte de una proyecto más amplio en el que han participado cinco universidades europeas, desarollándose en el marco del Programa DAPHNE cuyo objetivo es la prevención de la violencia y la protección de menores, jóvenes y mujeres víctimas de violencia.

Vivir en una habitación en un piso compartido con terceras personas constituye una de las muchas estrategias que desarrollan las mujeres para evitar un empeoramiento de su situación. Sin embargo, con esta iniciativa, se quiere remarcar que una habitación nunca puede considerarse un hogar y que toda familia necesita una vivienda digna y adecuada, un espacio seguro, estable y acogedor. Porque vivir en una habitación afecta de manera negativa a todas las esferas de la vida, incluida la salud y el desarrollo y aprendizaje en el caso menores. Además, hablar del derecho a la vivienda es hablar no sólo de tener un techo, sino del derecho a disfrutar de una ciudadanía plena.