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La ordenanza sobre tasas municipales «no es de izquierdas, ni derechas, sino responsable»

El portavoz del PSE, Alfonso Gil, ha señalado que las ordenanzas fiscales del equipo de Gobierno son «progresistas y progresivas» y ha insistido que son una propuesta «razonable. Desde el PNV han asegurado que no afectará a «la economía de las familias» y que se trata de una proposición «razonable» ni de «izquierdas ni derechas».

La concejala de Economía y Hacienda, Marta Ajuria.

El pleno del Ayuntamiento de Bilbo ha aprobado las ordenanzas fiscales para 2018, con un aumento general de un 2% en las tasas e impuestos municipales y con un recargo del 25 % en el IBI a las viviendas vacías.

Las ordenanzas han sido respaldadas por los concejales de los partidos que sustentan el gobierno municipal, PNV y PSE, mientras que EH Bildu, PP, Udalberri y Goazen han votado en contra. El equipo de gobierno ha aceptado 7 de las casi 100 enmiendas presentadas al proyecto por los grupos de la oposición, 2 del PP, Udalberri y Goazen y 1 de EH Bildu.

La portavoz del PNV, Nekane Alonso, ha puesto de relieve que el proyecto de ordenanzas impulsado por el equipo de gobierno «no es de izquierdas ni derechas, sino responsable». Ha señalado que son necesarios recursos «para seguir avanzado» y que el Ayuntamiento ejerza de «motor económico». «Y eso -ha insistido- es posible con una fiscalidad justa y responsable, sin tocar la economía de las familias».

El portavoz del PSE, Alfonso Gil, ha señalado que las ordenanzas fiscales del equipo de Gobierno son «progresistas y progresivas» y su objetivo es «mantener el nivel y calidad de los servicios públicos municipales, no incrementar la presión fiscal, continuar incentivando la actividad económica e introducir elementos que puedan favorecer la movilidad de viviendas vacías».

«Es una propuesta razonable, que pretende mantener el nivel de calidad de los servicios públicos», ha insistido.

Rechazo del resto de grupos

La concejala de EH Bildu Izaskun Guarrotxena ha considerado que las ordenanzas impulsadas por PNV-PSE son «de derechas», puesto que «la mayor parte de la carga fiscal» se hace recaer «en la ciudadanía, liberando a las empresas más potentes».

La portavoz de EH Bildu, Aitziber Ibaibarriaga, ha añadido que su formación quiere «un país libre, y, además, justo», y ha recriminado al PNV que «pacte con aquellos que nos niegan ser un país libre y también con quienes nos imponen condiciones».

La portavoz de Udalberri, Carmen Muñoz, ha calificado de «liberal y socialmente aséptico» el modelo de ordenanzas que defienden PNV y PSE, ha considerado «necesaria una política fiscal alternativa» y ha dicho que las iniciativas de su coalición buscan poner la política fiscal «al servicio de las mayorías sociales».

El portavoz de Goazen, Francisco Samir Lahdou, ha opinado que las ordenanzas son «conservadoras», ha calificado de «tímido» el recargo de un 25 % en el IBI a las viviendas vacías y ha propuesto un gravamen del 150 % «para empezar».

Lahdou ha estimado que las ordenanzas benefician a las confesiones religiosas y a las «familias tradicionales».

Por su parte, el portavoz del PP, Luis Eguíluz, ha criticado que «el PNV sube los impuestos espoleado por los grupos de izquierda» y ha afirmado que el incremento de las tasas «no sería necesario si se gestionara mejor el dinero público».