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LAB presenta un decálogo de medidas para salvar la industria vasca ante la «inacción» de Lakua

LAB ha presentado hoy en Bilbo un decálogo de medidas para hacer frente «a la grave situación de la industria» en vista de la «inacción» del Ejecutivo Urkullu. Jonan Goñi, de la Federación de Industria, ha ironizado sobre el «plan de choque» que anuncia el Gobierno, asegurando que quien merece ese plan es toda la política en esa materia, causante de que 6.000 empresas hayan cerrado desde 2008.

Responsables de la Federación de Industria de LAB, acompañados de trabajadores de empresas en crisis. (ARGAZKI PRESS)

Responsables de la Federación de Industria de LAB, acompañados de una veintena de trabajadores de empresas en crisis, han comparecido en Bilbo para denunciar que lo que se está viviendo en las últimas semanas en el sector «no es únicamente producto de vaivenes empresariales o del mercado», sino de la ausencia de una política industrial por parte del Ejecutivo Urkullu. Zorion Ortigosa y Jonan Goñi han recordado que el sindicato realizó en febrero de 2017 un diagnóstico sobre la situación de la industria, en el que alertó de sus problemas estructurales.

La propuesta de LAB no recibió respuesta del Gobierno autonómico, han lamentado, lo que unido «a la falta de iniciativa» de las instituciones, ha provocado que no se hayan puesto en marcha medidas para evitar situaciones como las que están viviendos los trabajadores de Grupo CEL, CNA Fagor, Unipapel, Ingemar, Aernnova, Ofita, General Electric, STS, Bosch, Pine, Vicrila y Enersys, sin olvidar otras empresas con plantillas más pequeñas.

Goñi ha respondido a la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia, que negó hace unos días que haya una crisis generalizada en la industria y aseguró que «está creciendo» con las salvedades de las empresas al borde del cierre. El responsable sindical ha calificado lo dicho por Tapia de «falta de respeto absoluto» hacia los trabajadores afectados. «Hablar de recuperación es un insulto a los trabajadores que se han dejado la vida en las fábricas, un insulto a los trabajadores que no llegan a final de mes y un insulto a quienes cada vez sufren más la precariedad, porque esa mejora solo llega a los lobbys empresariales, como Confebask y Cebek», ha manifestado.

Ortigosa y Goñi han incidido en la importancia de que se ejerza la plena soberanía para «diseñar la política industrial que necesita Euskal Herria» en el ámbito fiscal, financiero, de legislación laboral, la ley concursal y las relaciones internacionales. Por ello, la han reivindicado, al estimar que es un «instrumento imprescindible para construir un modelo productivo propio.

«Lo que necesitamos es voluntad, más si cabe cuando se utiliza como excusa el problema de la falta de soberanía para no realizar precisamente el camino para lograr la misma y, peor aún, cuando se utilizan competencias propias para realizar simplemente una traslación del modelo de España, tal y como hacen el Gobierno Vasco y el PNV», han lamentado. La central reclama que se actúe, ya que la actual política industrial da a entender que quien gobierna en Ajuria Enea es el PP.

LAB considera que es posible cambiar el rumbo de la política industrial, siempre que exista voluntad política. De ahí que haya propuesto un decálogo de medidas, algunas de ellas ya conocidas pues se propusieron en febrero al Gobierno de Gasteiz.

Iratxe Azkue, de la Federación de Industria, ha mencionado la necesidad de acometer un «verdadero debate» para definir el Plan Industrial; elaborar un plan contra las deslocalizaciones; alcanzar el 3% de gasto en investigación y desarrollo como establece la UE; así como el apoyo público a los sectores estrategicos, contando como instrumento con Kutxabank. Asimismo, plantean medidas de blindaje ante el cierre de empresas, impulsar el contrato relevo para transmitir conocimiento entre generaciones y democratizar las empresas. Tampoco se olvidan de su reclamación de que se garantice el derecho a la negociación colectiva, medidas para garantizar el mantenimiento del conocimiento adquirido y trabajar en la redacción de un plan que garantice la aportación de la mujer en el sector.