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Las autoridades kurdas proponen a Bagdad dejar en suspenso los resultados del referéndum

El Gobierno de Kurdistán Sur ha propuesto al Ejecutivo iraquí la suspensión de los resultados del referéndum de independencia celebrado el 25 de setiembre para «abrir un diálogo» entre ambos ejecutivos.

Ciudadanos kurdos protestan ante una oficina de la ONU en Erbil, capital de Kurdistán Sur. (Safin HAMED/AFP)

En su comunicado, las autoridades kurdas han apuntado a «la peligrosa situación y la tensión» existente, resaltando que «ello fuerza a estar a la altura de la responsabilidad histórica y no permitir que la situación lleve a una guerra».

Así, ha subrayado que anunciará inmediatamente un alto el fuego y el fin de todas las operaciones militares en Kurdistán Sur, expresando su deseo de «abrir un diálogo basado en la Constitución iraquí».

«Los ataques y las confrontaciones entre las fuerzas iraquíes y los peshmerga que empezaron el 16 de octubre, y especialmente los enfrentamientos de hoy (por el martes), han causado daños a ambas partes y podrían llevar a un continuado derramamiento de sangre, infligiendo dolor y levantamientos sociales entre los diferentes componentes de la sociedad iraquí», ha dicho.

«La continuación de los combates no lleva a ninguna de las partes a la victoria, sino que llevará al país hacia el desorden y el caos, afectando a todos los aspectos de la vida», ha argumentado.

Por ello, ha propuesto un alto el fuego inmediato y el fin de las operaciones militares, la suspensión de los resultados del referéndum –en el que el «Sí» obtuvo el 91% de los votos con gran participación– y la apertura del citado diálogo fundamentado en la Constitución del país asiático.

El comunicado ha sido publicado apenas dos días después de que el primer ministro de Kurdistán Sur, Nechirvan Barzani, afirmara que las continuadas operaciones militares del Ejército iraquí dañan los esfuerzos por iniciar un diálogo.

Barzani indicó en este sentido que las autoridades kurdas estaban dispuestas a enviar una delegación a Bagdad para iniciar «conversaciones serias» y «abrir una nueva página», recalcando que los problemas deben ser resueltos «de forma pacífica y en el contexto de la Constitución iraquí».