UPN, PSN y PP aseguran que la manifestación del 2 de junio no es contra el euskara
UPN, PSN y PP niegan que su apoyo a la manifestación del 2 de junio sea contra el euskara sino que lo es en contra de la política lingüística del Gobierno de Nafarroa.
Por eso, Javier Esparza, UPN, ha pedido «respeto» en lugar de «persecución mediática» y defendido la «legitimidad» para convocar una manifestación y participar en ella.
«Menos prepotencia y mas humildad», ha instado, al tiempo que ha subrayado que el euskara «no puede ser una herramienta que rompa la igualdad de oportunidades en el acceso al empleo público».
María Chivite, PSN, ha sostenido por su parte que en Nafarroa el euskara no es oficial y lo conoce y habla menos del 10 % de la población, por lo que no se puede comparar la política del Ejecutivo con la del Gobierno valenciano.
Y ha recordado que el TSJN ya ha dictado varias sentencias que anulan oposiciones por un «peso excesivo del euskera», por lo que ha advertido de que esta política, «intentado imponerlo», una «política identitaria», puede tener un «efecto búmeran».
También Ana Beltrán, PP, ha visto «circunstancias diferentes entre Navarra y Valencia» y «mucho más grave» lo que sucede en el herrialde porque en Nafarroa se busca «pisotear a la mayoría» mientras que el valenciano es oficial y lo habla más de la mitad de la población.
Por el contrario el portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, ha afirmado que la manifestación se basa «en falsedades y mentiras» y ha calificado la movilización del 2J de «identitaria, antinavarra castellanista», por lo que se ha comprometido a seguir trabajando por la «normalización del euskera» con una política «democrática, centrada y templada» ya que el «euskera es una riqueza» que hay que cuidar para evitar su desaparición.
Por eso ha indicado que en Geroa Bai «llama la atención» que PSN y UGT se «unan a la derecha» que en Valencia y Baleares se manifestará en contra de esos gobiernos, liderados por el Partido Socialista.
Por otra parte, Martínez, se ha referido a la comisión que investiga en el Parlamento la desaparición de Caja Navarra para apuntar que por las explicaciones conocidas hasta ahora, Geroa Bai tiene claro que las entidades que siguieron un modelo de integración territorial han pervivido en sus comunidades, mientras que en Nafarroa se impulsó un modelo «expansivo y grandilocuente», al que ha sumado «un pésima gestión» por parte de Enrique Goñi con «el silencio cómplice» de los sucesivos gobiernos de UPN.