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Entrevista
YVES UGALDE
TENIENTE DE ALCALDE Y encargado de hermanamientos

«Baiona e Iruñea hacen coproducción cultural»


«Existen días de protocolo y días formidables, la jornada que yo he vivido estos sanfermines en el Ayuntamiento de Iruñea entra en esta última categoría» asegura Yves Ugalde. Teniente de alcalde a cargo de Cultura, Fiestas y Hermanamientos, atiende a GARA, en pleno carrusel de entrevistas, en el Bastión Real.

La imagen que debía acompañar a esta entrevista de color era precisamente de ese «marco incomparable», salvo que el contenido de la corta conversación hizo que la utilización de una imagen de archivo reciente se impusiera como bastante más pertinente. Hoy se repetirá en Baiona el encuentro, seguro distendido, entre representantes municipales de Iruñea y Baiona. Por eso, toca hacer balance. «La diferencia de óptica política es clara y, al principio de nuestro mandato eso nos parecía una dificultad, pero he de reconocer que ese a priori no estaba justificado».

El hermanamiento desborda hoy el marco festivo, «ya que hemos formalizado intercambios en distintos ámbitos, escolar, deportivo, turístico-cultural, lo que nos sitúa ante otro horizonte». ¿Exactamente cuál? Ugalde baja al terreno de lo concreto. «Pongamos que hay un artista, un evento, que nos interesa a ambas partes pero que por la dimensión de nuestras ciudades no estamos en disposición financiera de atraer, pues bien, las dos ciudades actúan a la vez, hacen una propuesta conjunta, y enriquecen su oferta cultural». Para el edil, «eso demuestra la calidad del hermanamiento, que nos ha permitido pasar de ser meros colaboradores a explorar la coproducción cultural».

Misa de bandas

Para Ugalde es el momento más emotivo: la misa de bandas. Y la de hoy será especial. «Sonarán jotas, canciones en gascón, en francés... y por fin también en euskara. Llevo 26 años en esto y eso antes era impensable, hoy veo en ello otro signo de serenidad, y aprovecho para poner en valor el esfuerzo de los actores de la paz, y decir que vamos por el buen camino, el que nos permite trabajar juntos, sin los a prioris del pasado, y eso aunque defendamos proyectos políticos, como digo, diferentes. Disculpe mi vehemencia –se despide– soy feliz por el momento que vive este territorio y esta ciudad».