Navarra Suma apuesta por un plan estratégico de atención al cáncer
Navarra Suma ha propuesto un plan estratégico de atención al cáncer que, entre otras medidas, incorpore un nuevo programa de detección de cáncer de cuello de útero, circuitos de alta resolución que agilicen el diagnóstico y reduzcan la incertidumbre, y mejoras en el tiempo de espera de revisiones.
El plan conllevaría además atención especializada ininterrumpida a las urgencias oncológicas o el desarrollo de la unidad de cáncer hereditario que, aunque solo supone entre un 5 y un 10% de los casos de cáncer, requiere atención en unidades de alta especialización.
En este sentido, la candidata al Parlamento navarro Cristina Ibarrola ha indicado en un acto electoral que en Navarra Suma trabajarán en el «impulso de la medicina personalizada, que permite un diagnóstico preciso del tipo de cáncer y la selección de tratamientos personalizados que mejoran la respuesta, reducen toxicidad y costes innecesarios».
Ha destacado también que quieren «reducir las listas de espera, volviendo a mantener las esperas medias previas a la crisis económica y cumpliendo con la ley de garantías».
Y es que según Ibarrola, en la actualidad «hay 36.126 pacientes en lista de espera de primera consulta con una espera media de 43 días, muy por encima de la ley de garantías que marca 30 y de la que había en junio de 2011, con 22.205 pacientes con una espera media de 19 días» y un nivel de inversión «similar al de ahora».
La candidata ha añadido que Navarra Suma pretende «un sistema sanitario de calidad y excelencia, líder en Europa» y para ello ha defendido la «gestión basada en valor, que se está desarrollando en los países del norte de Europa y permite priorizar las inversiones en aquellas prestaciones que mayor ganancia en salud producen a la población».
Asimismo quieren reforzar la inversión en renovación tecnológica y telemedicina; garantiza la atención equitativa a toda Nafarroa en geriatría, enfermedades respiratorias, demencias y problemas de desnutrición; recuperar el liderazgo en vacunas; elaborar un nuevo plan de salud laboral que reduzca la siniestralidad; y ampliar la «prueba del talón» a más enfermedades para prevenir la discapacidad en la infancia.
Del mismo modo ha abogado por un «cambio en el modelo asistencial, integrado y centrado en la persona», de forma que se incrementen los recursos «en alternativas más adecuadas y eficientes a la atención hospitalaria», con hospitalización domiciliaria y cuidados paliativos específicos para población infantil y ejercicio físico y fisioterapia tanto en pacientes ingresados en hospitales como en los domicilios y en los centros residenciales.
Objetivos para los que Ibarrola ha comentado que «es necesario contar con la implicación y el apoyo de los profesionales sanitarios, principales activos del sistema y los que han mantenido a Navarra a lo largo de muchos años como pionera en salud».
De ahí que persiga «atraer y retener a los mejores profesionales» y crear cauces de comunicación y consenso que ayuden a resolver el «creciente malestar» que hay por ejemplo entre los médicos.