Profesionales de la atención primaria alertan de una sobrecarga de trabajo que afecta a la asistencia
Una multitudinaria manifestación ha recorrido el centro de Gasteiz este mediodía para denunciar la falta de personal en la Atención Primaria de Osakidetza. Médicos de familia, pediatras y personal de enfermería y administración han alertado de la carga e trabajo con la que desarrollan su profesión y que esta situación está afectando a la calidad del servicio que prestan. La plataforma de pensionistas, asociaciones vecinales y de familiares y enfermos han marchado junto a los profesionales sanitarios.
La situación no es nueva y precisamente porque no ven movimientos suficientes que representen una mejora en les servicio, profesionales y usuarios han destacado juntos en las calles de Gasteiz que «no contar con personal suficiente representa una atención deficiente». «Por falta de personal, la primaria está fatal», «Menos direcciones, más contrataciones» o «Atención sin tiempo, atención de riesgo» son algunos de los eslóganes que se han escuchado durante la movilización, respaldada por todas las centrales con representación en Osakidetza.
Profesionales de distintos ámbitos de la atención primaria destacan que la sociedad actual presenta distintas problemáticas sanitarias que requieren una atención que no pueden abordar como quisieran. Tras remarcar que no están reclamando mejoras laborales sino mejoras en el servicio para «atender mejor a la gente», han destacado que están trabajando bajo una presión derivada de la falta de tiempo que afecta también a los y las profesionales.
«Afecta a los más humildes»
Junto a sindicatos y personal se han movilizado también pensionistas. Desde la plataforma de Araba han destacado en un comunicado leído en la marcha que los profesionales están demandando «recursos que necesitan para poder hacer su trabajo con garantías suficientes para poder ofrecer una asistencia con calidad y seguridad». «La Atención Primaria es el servicio más cercano y el que más utiliza la ciudadanía. Es, por lo tanto, vital para el sostenimiento del sistema público de salud», han manifestado portavoces de los pensionistas, que han alertado también de que «degradar la calidad de la sanidad pública no afecta a las clases más altas, ya que estas no la necesitan, sino que afecta a las personas más humildes».