Los consejeros del PSE no han discrepado del apoyo de Urkullu a la Patronal del Metal

Los consejeros del PSE no han mostrado ningún tipo de discrepancia con las palabras del  lehendakari, Iñigo Urkullu, en las que aseguró que la patronal del Metal de Bizkaia había hecho «todo lo posible» por evitar la huelga y que los sindicatos no tenían voluntad de negociar. El portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, ha añadido que la huelga es un instrumento legal «pero hay usos más y menos legítimos, más y menos éticos y ortodoxos de esos instrumentos».

Los tres consejeros del PSE no han mostrado «ningún tipo de discrepancia» ni tras la conferencia ofrecida por el lehendakari el lunes ni lo han hecho en los prolegómenos del Consejo de Gobierno de hoy, con las palabras de Iñigo Urkullu sobre que la Patronal del Metal de Bizkaia había hecho «todo lo posible» por evitar la huelga y que los sindicatos no tenían voluntad de negociar, como a su entender demuestra el hecho de que en primavera ya se anunciara «un otoño caliente». El portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, ha explicado que se ha suscitado la conversación antes de que comenzara la reunión formal y «tampoco es que se haya sometido a contraste o debate la cuestión, pero no ha habido voz discrepante por parte de ninguno de los integrantes del Gobierno».

Según ha tratado de explicar el portavoz, «el lehendakari emitió una opinión con respecto a los términos y condiciones en los que se está produciendo la huelga que yo creo que era irreprochable desde el punto de vista de la realidad de los hechos». No dijo quién tenía razón ni que no haya derecho a la huelga, «simplemente vino a decir que él aprecia que una convocatoria que estaba anunciada desde primavera difícilmente pone de manifiesto que haya existido una voluntad de negociar para alcanzar acuerdos por parte de las organizaciones sindicales. Ya en primavera –ha insistido Erkoreka– se anunciaba un otoño caliente que evidentemente estamos empezando a comprobar que se produce».

Usos más y menos éticos de la huelga

Ante el hecho de que el lehendakari dijera públicamente estar «absolutamente seguro» de que la Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM) ha hecho «todo lo posible» para intentar llegar a acuerdos con los sindicatos, el portavoz del Ejecutivo ha dicho no recordar exactamente la literalidad de las palabras de Iñigo Urkullu.

En todo caso, ha apuntado que «el lehendakari claramente ha constatado que estamos hablando de algo que trasciende de las relaciones laborales propiamente dichas». Después, Josu Erkoreka ha afirmado que «en el ámbito de las relaciones laborales la negociación colectiva está abierta, el recurso a la huelga es un instrumento legal y constitucional», pero a renglón seguido ha entrado a matizar que «hay usos más y menos legítimos, más y menos éticos y ortodoxos de esos instrumentos».

En cuanto a la evidencia de que muchas huelgas, por ejemplo las de controladores, se anuncian con mucho margen de tiempo precisamente para forzar una negociación, y al hecho de que inusualmente todas las centrales sindicales estén unidas en este caso, el portavoz del Gobierno de Urkullu se ha vuelto a centrar en que los sindicatos no han querido negociar.