Grande-Marlaska insiste en que el problema en Catalunya es de «estricto orden público»

El ministro español de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha insistido en que los incidentes de los últimos días en Catalunya tras la sentencia del procés son un problema de «estricto orden público» a los que hay que responder, dice, con la «legítima» actuación de las fuerzas de seguridad, que están reprimiendo de forma brutal las protestas.

Fernando Grande-Marlaska no admite el carácter político de las protestas contra la sentencia del procés que recorren las calles de Catalunya y que están siendo reprimidas de forma brutal por las policías española y autonómica y ha insistido en que los incidentes registrados los últimos días, sobre todo en Barcelona, son un problema de «estricto orden público» que se debe resolver con la «legítima» actuación de las fuerzas de seguridad.

En una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, ha señalado que los incidentes «van a menos» y que se sigue «con el plan de anularlos».

Según el balance facilitado por Grande-Marlaska, que no da cuenta de los heridos por las actuaciones policiales y se refiere solo a los agentes, se han practicado 194 detenciones. Ha señalado que 18 personas han ingresado en prisión, según los datos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, aunque todavía hay detenidos pendientes de pasar a disposición judicial.

«El Estado actúa y seguiremos deteniendo a quienes protagonizan actos violentos», ha añadido el titular de Interior que ha lanzado «un mensaje al independentismo»: «Estamos ante un problema de estricto orden público como ocurre en otras democracia y quienes se sitúan en el desorden se encuentran con la Constitución y el Código Penal con toda su contundencia».

Por eso, ha defendido que «la respuesta es de orden público» basada en la actuación legítima y proporcional de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. «Para erradicar el problema hay que actuar específicamente frente a violentos», ha añadido.