GHK se plantea llevar también a Zubieta parte de los residuos industriales
Tras el derrumbe de Zaldibar, el próximo cierre de Mutiloa dejará como única opción cercana para los residuos industriales no peligrosos el vertedero de Epele, en Bergara.
El diputado de Medio Ambiente y Obras Hidráulicas de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, se ha reunido esta mañana con los presidentes de las mancomunidades de residuos de Gipuzkoa para analizar la situación tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar. Esto, unido al próximo cierre de Mutiloa, deja como única opción cercana para los residuos industriales no peligrosos el vertedero de Epele, en Bergara.
Según han explicado en una nota, las mancomunidades de Gipuzkoa, además de los residuos urbanos de origen doméstico, gestionan otros flujos de residuos de origen comercial o industrial que, a pesar de ser asimilables a los urbanos, son depositados en vertederos industriales. Es el caso de los embalajes de tipo comercial, restos de voluminosos, residuos de origen agrícola o ganadero y otros residuos depositados en los ‘garbigunes’.
La Diputación y las mancomunidades no son competentes en materia de residuos industriales, pero Asensio ha defendido que «tenemos unas infraestructuras modernas y sostenibles para nuestros residuos urbanos que pueden contribuir a solucionar el problema reduciendo el vertido de residuos». En esta red se incluyen las planta de clasificación de envases de Legazpi, la planta de compostaje de Epele y las instalaciones de Zubieta, donde se ubica la incineradora.
Para avanzar en esta posibilidad, GHK se ha comprometido a analizar la tipología de los residuos, la viabilidad técnica para tratarlos y las autorizaciones que sean necesarias.