El parón en la construcción salta a la vista en las obras públicas
La suspensión de las actividades no esenciales desde este lunes ha tenido un notable impacto fácil de observar en el sector de la construcción, tanto en las contratadas por las instituciones públicas como en las de iniciativa privada. Las excepciones hacen referencia a labores de mantenimiento o a casos especiales como la búsqueda de los dos trabajdores desparecidos en el vertedero de Zaldibar.
La lehendakari navarra, María Chivite, ha sido una de las representantes institucionales que ha confirmado que a partir de este lunes quedarán paralizadas la mayoría de las obras públicas en Hego Euskal Herria.
En rueda de prensa, Chivite ha subrayado que la «hibernación» de las actividades no esenciales es algo que queda «meridianamente claro» en el real decreto aprobado el domingo por el Gobierno español, lo que, por ejemplo, supone una ralentización en la construcción del tren de alta velocidad y del Canal de Navarra, dos infraestructuras «importantes para el desarrollo económico» del herrialde. No obstante, ha puntualizado que «nuestra prioridad es la salud de las personas».
La paralización del sector de la construcción afectará previsiblemente a un 89% de las obras en el Estado, según el gremio de aparejadores y arquitectos ténicos. En concreto, el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España (CGATE) ha indicado que las comunidades autónomas que se pueden ver más afectadas por esta nueva medida son Nafarroa (donde el 100% de las obras se mantenían operativas), la CAV (87%) y Cantabria (97%).
Los arquitectos superiores y técnicos y los ingenieros técnicos de obras públicas subrayaron la semana pasada que la rápida transmisión del coronavirus «ya no garantizaba completamente» las condiciones de seguridad y protección de la salud de los operarios que están a pie de obra.
Continúa la búsqueda en Zaldibar
Como es lógico, entre los trabajos que se mantendrán en Bizkaia están los de la búsqueda de los dos trabajadores, Joaquín Beltrán y Alberto Sololuze, cuyos cuerpos continúan sepultados bajo los escombros del vertedero de Zaldibar en el que se produjo un derrumbe el pasado 6 de febrero.
La Diputación de Bizkaia, por su parte, ha señalado que, si bien queda «en suspensión» la ejecución de diversas obras que estaba realizando en las carreteras del herrialde, continuará desarrollando las labores habituales de conservación, mantenimiento y emergencia en la red foral. También mantendrá activo el plan de vialidad invernal.
Entre otras, han quedado suspendidas las obras de acceso al Parque Tecnológico de Ezkerraldea, la segunda fase de la Variante Sur Metropolitana, el vial de Bermeo, la segunda fase de reordenación del enlace de Kukularra y la pasarela de Ondarroa.
Puentes y polideportivos en Donostia
La totalidad de las obras de las carreteras de titularidad foral de Gipuzkoa han quedado paralizadas, salvo actuaciones que se consideren de «urgencia», como las que tengan relación con deslizamientos o desprendimientos en laderas que obstaculicen carreteras.
Estas medidas en obras públicas se suman a las ya adoptadas por otros municipios como Donostia, que ha dado orden a todas las empresas y contratas para que «paralicen las actuaciones que venían desarrollándose en la ciudad» hasta que «la situación se normalice».
Entre otras, se ven afectada las obras de renovación del tramo de la barandilla de La Concha más cercano al túnel del Antiguo; la renovación de aceras en Sancho el Sabio; los polideportivos de Altza y Riberas de Loiola; los puentes de Espartxo (Txomin Enea) y Astiñene (entre Loiola y Egia); las obras de Anoeta; y los trabajos previos a la demolición del viaducto de Iztueta.