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Obama considera que la gestión del coronavirus por Trump está siendo un «desastre absoluto»

Hasta ahora Barack Obama se había mostrado muy comedido al valorar la respuesta de la Administración de Donald Trump a la epidemia del coronavirus. En una conversación con varios excolaborades de su gobierno, el expresidente ha cargado durante contra su sucesor, cuando su país es el que más muertes por el Covid-19  ha registrado en el mundo, con cerca de 80.000.

Barack Obama, en una imagen de archivo. (Christof STACHE | AFP)

El expresidente de EEUU Barack Obama considera que la gestión de la pandemia del coronavirus de su sucesor en la Casa Blanca, Donald Trump, ha sido «un desastre caótico absoluto», según han informado este sábado medios estadounidenses.

Obama hizo esta dura crítica, la más explícita que le ha hecho hasta ahora, la noche del viernes durante una conversación telefónica de media hora con excolaboradores de su gobierno de la que Yahoo News obtuvo una grabación.

En la charla, el exmandatario demócrata mencionó la gestión de la crisis sanitaria al referirse a la necesidad de elegir buenos dirigentes y pedir a sus exasesores que se involucren en la campaña de Joe Biden, que fue su vicepresidente y que ahora es el virtual candidato demócrata a la Presidencia de EEUU en las elecciones que se celebrarán en noviembre.

«Las próximas elecciones, en todos los niveles, son muy importantes porque no solo nos enfrentaremos a un individuo o un partido político», subrayó.

Tendencias a largo plazo

Añadió que el verdadero adversario son las «tendencias a largo plazo», como «ser tribal, estar divididos, ver a los demás como enemigos, que amenazan con instalarse en la «vida estadounidense».

Todavía muy popular entre los electores demócratas, Obama insinuó anteriormente que Trump había «desestimado las advertencias» sobre los riesgos de una pandemia por el Covid-19.

Los detractores del multimillonario republicano le acusan de haber minimizado la amenaza primero, y de dar instrucciones contradictorias y confusas después, entre llamamientos a la prudencia y la prisa por reactivar la economía.